Hijos y cónyuges de dirigentes y familiares de empleados aparecen implicados en investigación
La esposa de Jovino Novoa, María Mackenna Echaurren, ha recibido más de $350 millones por vías cuestionadas por el SII. No es el único caso, las cónyuges de varios dirigentes gremialistas están siendo investigadas por emitir boletas falsas, y las familias de empleados del partido también aparecen involucradas en la emisión de documentos cuestionados a Penta y SQM.
La Fundación Jaime Guzmán asegura que el creador de la UDI asociaba a la Virgen con Chile. “Admiraba en Ella su sencillez, su modestia, su humildad. Su disposición y disponibilidad para hacer familia, junto a Jesús y a José. Pensaba que el modelo de familia debía ser, para nosotros, el hogar de Nazareth. Todos al servicio de todos…”. Para Jaime Guzmán, la familia era una institución fundamental. Una de las bases de la civilización occidental cristiana.
“La familia es el núcleo fundamental de la sociedad”, asegura el artículo 1 de la Constitución de 1980, la misma que rige a Chile hasta hoy y cuyo máximo ideólogo fue Guzmán.
Ese corpus ideológico fue transmitido con éxito a sus discípulos gremialistas, los que hasta el día de hoy se identifican con las posturas más conservadoras y defensoras del statu quo político y social. Dentro del espectro partidista nacional son los más férreos opositores al matrimonio homosexual, al aborto legal y la eutanasia, entre otras materias. Pero la investigación de la Fiscalía develó que la unión familiar que profesan los militantes de la UDI también se refleja en el entramado que utilizaron para obtener dinero de las empresas por vías extralegales.
A las 15:20 horas del 6 de abril del año en curso, el Servicio de Impuestos Internos (SII) notificó a la cónyuge del ex senador Jovino Novoa, María Mackenna Echaurren, para que una semana después entregara una serie de documentos que sirvieran para justificar los $358 millones que recibió de Inversiones y Mandatos S.A. entre 2009 y 2014.
La citada sociedad es indagada por la Fiscalía debido a una serie de boletas falsas que se descubrieron en el marco del escándalo Penta, donde se ha podido acreditar que Novoa era el nexo mediante el cual la empresa de Carlos Alberto Délano y Carlos Eugenio Lavín financiaba irregularmente a la UDI.
María Mackenna Echaurren es hermana del fallecido Luis Fernando Mackenna –padre del animador de televisión Pablo Mackenna–, quien estuvo involucrado en el Caso Chispas, y cuya sucesión fue condenada en 2014 por la Corte Suprema a pagar una multa de $24.261 millones por negociación incompatible.
[cita] A las 15:20 horas del 6 de abril del año en curso, el Servicio de Impuestos Internos (SII) notificó a la cónyuge del ex senador Jovino Novoa, María Mackenna Echaurren, para que una semana después entregara una serie de documentos que sirvieran para justificar los $358 millones que recibió de Inversiones y Mandatos S.A. entre 2009 y 2014. La citada sociedad es indagada por la Fiscalía debido a una serie de boletas falsas que se descubrieron en el marco del escándalo Penta, donde se ha podido acreditar que Novoa era el nexo mediante el cual la empresa de Carlos Alberto Délano y Carlos Eugenio Lavín financiaba irregularmente a la UDI.[/cita]
El 14 de abril pasado, la esposa de Novoa le respondió al SII. A través del abogado Renato Catalán Barahona allegó las actas de las juntas de accionistas de Inversiones y Mandatos, al igual que sus actas de directorio y las boletas emitidas por ella entre 2009 y 2014.
El análisis de esa documentación da cuenta de la dinámica de la empresa familiar de Novoa, en la que los únicos accionistas son él –12.250 acciones– y su esposa –7.500 acciones–, quien justifica en el escrito sus pagos, ya que “posee el cargo de directora desde 1988 y lo ha ejercido ininterrumpidamente hasta la fecha”, y agrega que fue gerente general entre 1988 y 1997, y luego de eso ejerció como presidenta hasta el presente.
No hay documentos asociados a los pagos, los que solo se justificarían por los cargos que ella ostenta como una de las dos accionistas de Inversiones y Mandatos. Hay actas de juntas de accionistas realizadas en Nueva York, durante viajes del matrimonio a esa ciudad en Estados Unidos. Los fiscalizadores del SII han cuestionado que los pagos a la señora de Novoa se imputen como gastos en la contabilidad de la sociedad, puesto que no cumplirían los requisitos legales para ser rebajados del impuesto de primera categoría.
Pero no es tan raro. En familias de privilegio económico, conservadoras y formadas en medio del siglo XX, era regla que el hombre hiciera los negocios y la mujer se limitara a ser una buena compañera de ruta. María Mackenna Echaurren se limitaba, según los datos que ella misma entregó al SII, a participar de reuniones junto a su esposo y a firmar las actas de esos encuentros. Aunque otros testimonios que están en las carpetas del caso le atribuyen otras responsabilidades.
Según lo que dijo la secretaria de Novoa, Bernardita Chamorro, al fiscal Carlos Gajardo, el coronel gremialista le ordenaba rellenar boletas de Carlos Lira –abogado independiente que colabora en el staff de Novoa– que eran giradas a empresas Penta. “Mantengo acceso a la página web del SII con la clave del señor Carlos Lira, quien me la proporcionó directamente para que yo confeccionara las boletas de honorarios, conforme a los datos que me informaba don Jovino Novoa”, aseguró Chamorro a la Fiscalía. Y luego agregó: “Mientras don Jovino Novoa era senador de la República hasta el año 2013, las instrucciones las canalizaba a través de su esposa Angélica Mackenna Echaurren, o su hijo Benjamín Novoa Mackenna, quien es abogado del estudio”. Todo queda en familia.
Otro coronel de la UDI ha observado cómo uno de sus hijos se ve involucrado en el escándalo de las platas irregulares a la política. José Tomás Longueira Brinkmann –hijo de Pablo Longueira– aparece en la contabilidad de Soquimich (SQM) emitiendo una boleta por $4.450.333 durante el 2010. José Tomás fue incluido en la denuncia que el SII presentó en abril por pagos considerados sospechosos.
No es el único del entorno de Longueira en ese listado. Loreto Undurraga Casteblanco, casada con Francisco Brinkmann Estévez –cuñado del ex ministro de Economía–, figura por boletas a SQM por un total de $14 millones. También están Rubén Carvacho y su esposa, Carolina Chamorro Martínez, por $5 millones cada uno por parte de la minera no metálica. Carvacho es el ahijado que Longueira siempre nombra en sus intervenciones públicas, aquel que conoció en un campamento y luego apadrinó.
La cónyuge del diputado Javier Macaya –ex secretario general de la UDI–, Constanza Farías Prieto, es investigada por boletear a SQM por un monto de $4,5 millones. A su vez, la nuera de Cristián Leay –ex diputado UDI, actual miembro del directorio de TVN en cupo gremialista–, Trinidad Subercaseaux Alessandri, es indagada por boletas por $5 millones también a SQM.
En el caso de esta última, está acreditado que se trató de boletas falsas, luego que ella asegurara al SII que “no me acuerdo bien quién me solicitó la emisión del documento, lo más seguro es que haya sido por parte de la familia de mi marido Alejandro Leay, que tiene afinidad con el partido UDI, pero no presté ninguna contraprestación a SQM, por lo tanto tampoco realicé ningún servicio, de hecho en esa fecha tenía mi hijo de 20 días de nacimiento. El dinero sí lo recibí mediante un vale vista por $5 millones y luego se lo entregué a mi suegro, Cristian Leay Morán. No conozco a nadie de la empresa Soquimich S.A.”.
El caso del ex subsecretario Pablo Wagner –actualmente en arresto domiciliario por cohecho, entre otras acusaciones–, es sintomático. Su cuñada, María Carolina de la Cerda, fue una de las primeras que reconoció ante la Fiscalía que las boletas que emitió a Penta, SQM, Genesis Partners y Díaz Moulian Silva y Wagner Gestores Limitada –de propiedad del mismo Wagner, además del ex timonel UDI, Ernesto Silva, y Vasco Moulian–, fueron falsas, y que estas le fueron solicitadas por su cuñado para financiar campañas políticas.
Otro que está en la misma situación es Roberto Lewin Valdivieso, Core de la UDI por Las Condes y que, durante el Gobierno de Piñera, fue jefe de la avanzada presidencial. Su hijo, Roberto Lewin Vial, emitió una boleta por $6.673.340 a SQM.
La investigación ha revelado que varios empleados de la UDI no solo prestaban sus servicios al partido en labores habituales, sino que también eran usados –junto a sus familias– para emitir boletas falsas a grandes empresas que permitieran financiar las labores políticas del gremialismo.
La secretaria histórica del partido, Marisol Cavieres, boleteó para obtener financiamiento para la UDI. En total, entre 2009 y 2012 aparece con pagos por $24.555.553 desde SQM. Y no lo hizo solo ella. Su marido, José Hormázabal, extendió boletas a la minera por $19.222.221 en 2012. También aparecen dos hijos del matrimonio –José Tomás y Matías–, el primero de los cuales facturó por $28.888.886, en tanto que el segundo por $4.4 millones.
El estafeta del partido, Carlos Sepúlveda, también está involucrado, como asimismo su esposa, Mónica Gajardo. Sepúlveda aparece boleteando por $87.277.769 entre 2009 y 2013 a SQM. En el mismo periodo, su cónyuge emitió documentos por $75.222.217.
Aunque el hecho de que estén familiares de políticos involucrados en irregularidades para financiar campañas no es un terreno exclusivo de la UDI –basta recordar a los hijos del presidente de la DC, Jorge Pizarro–, sí es el partido donde esta situación se da con mayor regularidad.
En todo caso, no solo Jaime Guzmán se preocupó de subrayar la importancia de la institución familiar. Ya lo decía Marlon Brando en El Padrino: “¿Pasas tiempo con tu familia? Bien, porque un hombre que no pasa tiempo con su familia nunca puede ser considerado un hombre de verdad”.
