Con votos de los senadores de Chile Vamos Andrés Allamand (RN), Víctor Pérez (UDI) y de la ex Nueva Mayoría Felipe Harboe (PPD) y José Miguel Insulza (PS), más los diputados Jorge Alessandri (UDI) y Paulina Núñez (RN), la Comisión Mixta del Congreso echó por la borda el proyecto de ley que endurecía las penas por estos delitos y, sobre todo, mejoraba la redacción de su tipo penal para evitar la impunidad de sus autores, cómplices y encubridores.
«Estos parlamentarios son cómplices de soborno y cohecho». Con estas palabras, el Director Ejecutivo de El Mostrador, Federico Joannon, se refirió al rechazo de la Comisión Mixta del Congreso Nacional, en votación dividida, del artículo del proyecto de Ley que facilitaba la acreditación de los delitos de soborno y cohecho, uno de los hitos que marcaron esta semana noticiosa.
El tema fue analizado durante la sección radial de El Mostrador en La Clave, y también se abrió un espacio de opinión en redes sociales. El dictamen de los internautas fue lapidario frente a la pregunta: “¿Cree usted que los parlamentarios que votaron en contra de rechazar la inhabilidad de ejercer cargos públicos en delitos de cohecho, son cómplices pasivos de este delito?”, el 97% consideró que efectivamente los senadores y diputados que trabaron la mejora legislativa son cómplices, y en Facebook algunos de los lectores calificaron a estos parlamentarios de “cómplices activos”.
Para Joannon, lo sucedido en la comisión mixta resulta “insólito”, sobre todo considerando que se trata de delitos que tienen un impacto social alto, más allá de la lectura política que se pueda hacer del episodio. «La Cámara de Diputados aprobó esta mejora legislativa, con endurecimiento de penas, y el Senado no lo aprobó. Entonces el tema fue a una Comisión Mixta, que es la forma de zanjar cuando pasa esto, y esta Comisión echó por la borda el proyecto», señaló el abogado y Director Ejecutivo de este medio.
«¿Qué es lo que hacen? No aprueban el real endurecimiento de penas, las suben un poco nada más, pero siguen siendo ridículas; y segundo, no mejoran el tema probatorio, sigue el cacho de tener que probarse (por el fiscal a cargo de la investigación) que hubo una“contraprestación” precisa, determinada, y eso es un absurdo procesal penal. Era el momento para mejorarlo, una Comisión para mejorarlo, y se cayó (…) por culpa de estos parlamentarios», añadió Joannon.
Luego, el Director Ejecutivo de El Mostrador precisó quiénes fueron los parlamentarios que votaron en contra, pertenecientes a las filas de Chile Vamos y la ex Nueva Mayoría: los senadores Felipe Harboe (PPD), José Miguel Insulza (PS), Andrés Allamand (RN), Víctor Pérez Varela (UDI) y los diputados Jorge Alessandri (UDI) y Paulina Núñez (RN). Y se abstuvo el senador DC Francisco Huenchumilla. En este panorama, los diputados Leonardo Soto (PS), Catalina Pérez (RD) y Gabriel Silber (DC) fueron los únicos que estuvieron por endurecer a mano.
Y señaló que, a su entender, «esta gente que no aprobó esta mejora (procesal penal) está permitiendo que en Chile siga habiendo soborno y cohecho, que no haya desincentivo para cometer estos delitos (porque el día de hoy es muy complicado sancionar estos delitos y cuando se logra sancionarlos, las penas son ridículamente bajas y los delincuentes no terminan en la cárcel); por lo que estos parlamentarios son verdaderos cómplices de soborno y cohecho. No sé si son cómplices pasivos, para seguir el lenguaje de Sebastián Piñera, o activos».
En este sentido, hizo la comparación con lo sucedido en Brasil, donde la clase política reaccionó a tiempo y endureció las penas para sancionar estos delitos, lo que permitió que en los últimos casos de corrupción el sistema esté funcionando, incluso con un ex Presidente de la República privado de libertad, algo diametralmente distinto a lo que ocurre en nuestro país. “En el sistema chileno, Lula estaría libre de polvo y paja”, comentó.
