Sustentabilidad
Las celebraciones de fin de año pueden causar un impacto importante en el medioambiente, sobre todo por la cantidad de plástico que se consume. En este contexto, el llamado es a ocupar productos amigables con la naturaleza y reciclar residuos para darle vida a nuevos productos.
La Navidad es uno de los momentos más esperados del año porque celebrarla es sinónimo de reunirse con la familia y los amigos para disfrutar y compartir.
Sin embargo, estas Fiestas tienen una cara poco amable que es su impacto ambiental, debido al excesivo consumo de distintos productos y la mayor generación de basura que eso implica.
En ese contexto, sin duda uno de los focos más problemáticos es el plástico. Según recientes estimaciones de Plastic Oceans, sólo en Reino Unido se desechan más de 114 mil toneladas de envases de este material que no son reciclados cada Navidad.
De ahí la relevancia de tomar conciencia, reducir al máximo su uso y reciclar el plástico siempre que sea posible. Para que puedas hacerlo en las próximas Fiestas, te compartimos cuatro consejos que ayudarán a tener una Navidad más sustentable y consciente con el medio ambiente.
Este es el primer paso y fundamental, porque no todos los plásticos son lo mismo y, lo más importante, no todos pueden ser reciclados. Para
identificarlos, basta buscar el número que contiene el símbolo de reciclaje en el artículo, que suele estar en la base o etiqueta, y luego buscar cómo puedes reciclarlo.
El más común es el PET (1), que es ampliamente usado por ser un polímero ligero y altamente maniobrable, que además genera menos huella de carbono en su elaboración.
Cuando hablamos de reciclar lo asociamos casi exclusivamente a estas, sin embargo, son muchos los envases plásticos presentes en las celebraciones que se pueden someter a este proceso.
Los potes de fruta fresca y frutos secos, recipientes de tortas, pasteles y galletas, empaques de sushi, pastas e incluso para huevos, son sólo algunos ejemplos.
Por eso, es fundamental que los revises y busques el número 1 (PET) que indica que pueden ser reciclados
Antes de llevarlos a un punto limpio, o bien depositarlos en los contenedores que dispone tu edificio, es clave que los enjuagues y los aplastes.
Además, procura no mezclar los que tengan diferente clasificación, pues eso impedirá que lleguen hasta el final del círculo de reciclaje. Una buena idea es hacer de esta actividad un panorama familiar, donde se incluya a los más pequeños, dando paso a la educación ambiental y creando en ellos mayor conciencia por el cuidado del entorno.
Cuando tengas dudas sobre la relevancia de reciclar, ten presente que no sólo estás evitando que esta basura se acumule en
vertederos o llegue directamente a contaminar los océanos, sino que además puede ser reutilizada como materia prima para nuevos envases.
En Chile, la empresa Integrity recicla botellas de bebida, agua y jugos, entre otros recipientes elaborados de plástico PET, y los transforma en materia prima para nuevos productos.
Cabe destacar que una tonelada de PET reciclado ahorra tres toneladas de emisiones de gases contaminantes y 640 litros de petróleo. Asimismo, producir una tonelada de PET reciclado consume casi un 70% menos de energía que la misma cantidad de PET virgen.
