Publicidad
#lasniñaspueden: la campaña que quiere terminar con los estereotipos de género desde la infancia Sociedad

#lasniñaspueden: la campaña que quiere terminar con los estereotipos de género desde la infancia

“Es importante cuestionarnos las situaciones de desigualdad, ya que esta transformación debe ser hecha por cada uno de nosotros, en nuestras familias, evitando regalar juguetes que reproducen los roles y estereotipos a las niñas», dijo en el programa Las Tres Marías de Radio LaCentral la directora de proyectos de Comunidad Mujer, Jessica González.


Visibilizar y desnaturalizar la incidencia que tienen los estereotipos de género en las decisiones vocacionales y priorizar la igualdad entre niños y niñas desde la infancia. Ese es el objetivo de la campaña “#lasniñaspueden” que impulsa Comunidad Mujer y cuyos detalles analizó la directora de proyectos de la entidad, Jessica González, en el programa Las Tres Marías de Radio La Central.

El diagnóstico actual es que si bien niños y niñas nacen con iguales habilidades, talentos y capacidades intelectuales, a medida que crecen los estereotipos de género marcan sus decisiones vocacionales. Así, por ejemplo, hasta cuarto año básico todos rinden igual en matemáticas, pero al egresar sólo el 13,5% de las estudiantes elige ingeniería, y por cada una mujer que ingresa a estudiar construcción, cuatro hombres lo hacen; mientras que sólo 1,5% de las jóvenes escoge una carrera relacionada con ciencias.

“Es importante cuestionarnos las situaciones de desigualdad, ya que esta transformación debe ser hecha por cada uno de nosotros, en nuestras familias, evitando regalar juguetes que reproducen los roles y estereotipos a las niñas; o pistolas a los niños, en términos de la agresión”, dijo Jessica González.

Explicó que los juguetes que se utilizan durante la infancia tienen un rol fundamental en la construcción de la identidad de niñas y niños, ya que a través del juego, van ensayando roles, construyendo estereotipos, desarrollando capacidades y estableciendo límites.» Pero ¿por qué seguimos regalando a las niñas casi exclusivamente muñecas, coronas de princesas o set de cocina? Autos, lupas, pelotas o microscopios, estimulan la creatividad e imaginación, permitiendo a las niñas desarrollar otras capacidades y moverse en el mundo de una manera distinta».

muneca-coheteLa directora de Proyectos dde Comunidad Mujer advierte además que “las niñas ya en primero básico consideran que la matemáticas son muy difíciles y que son cosa de niños. Hay un estudio que hizo Alejandra Misala, académica de la Universidad de Chile, a estudiantes de pedagogía donde queda demostrado que tanto los estudiantes hombres como mujeres, tienen una idea preconcebida de que los niños tendrían un mejor rendimiento en matemáticas que las niñas”.

“Además existe una invisibilidad de las mujeres en los espacios científicos, en ese sentido ¿a cuántas mujeres matemáticas conocemos?, o en la misma historia de Chile, las mujeres siempre son nombradas en relación a un hombre y en condición secundaria, aunque hayan sido protagonistas. Es lo que las estudiosas denominaban la invisibilidad analítica de las mujeres, ausente de toda la construcción del conocimiento”, agregó.

Chile ocupa el lugar número 128 de 142 países en el ranking mundial de igualdad de salarios entre hombres y mujeres, es decir, que las mujeres que realizan trabajos similares al de los hombres, reciben salarios 17,2% menores sólo por el hecho de ser mujeres. Asimismo, la brecha salarial entre hombres y mujeres en Chile correspondería a un promedio de 30%, lo que aumentaría en las especializaciones, es decir, que mientras mayor sea el nivel de cargo y el poder de decisión, mayor será la brecha salarial.

“Esto es dramático porque se traduce en que a un hombre le pagan $100 y a una mujer $70 sólo por el hecho de ser mujer, lo que es completamente injustificado y se sostiene sólo sobre una sociedad altamente machista y tradicional como la nuestra, donde aun se cree que las mujeres trabajan por una distracción o que obtienen un sueldo secundario, que no es relevante en la familia, sin embargo, las jefaturas de hogar femeninas siguen creciendo en el país llegando al 38% y estableciéndose como un sueldo fundamental dentro de un grupo familiar”, sostuvo.

Finalmente, se refirió a la entrada en vigencia en 2009 de la Ley 20.348, creada para terminar con esta desigualdad, pero que en la práctica no se aplica.

  “Esta es una mala Ley. Simbólicamente viene a marcar el discurso estatal de que debe haber un equilibrio en la remuneración entre mujeres y hombres, pero en la práctica no tiene mecanismos para operar o fiscalizar; quienes tienen que hacer la denuncia son las trabajadoras, pero tampoco hay obligación de que las remuneraciones de los otros sean publicadas…. Es una ley que debe corregirse, pero en este momento tampoco existen propuestas para mejorarla”.

lacentral-tresmarias
Publicidad

Tendencias