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El proyecto de la empresa Mediterráneo S.A. pretende intervenir, con una central de paso y torres de alta tensión, un de alto valor en cuanto a conservación y entrega de valiosos recursos a las comunidades locales.
La flora y fauna del río Puelo, ubicado en la Región de Los lagos, lo convierten en un lugar mágico y de alto valor en cuanto a conservación y entrega de valiosos recursos a las comunidades locales. Pero los lugareños y la industria turística del sector temen que este ecosistema se vea afectado por la construcción de una central hidroeléctrica de pasada, que significaría la instalación de torres de alta tensión que amenazan con arrasar todo a su paso.
Se trata de un proyecto perteneciente a la empresa Mediterráneo S.A. que fue aprobado y que pretende generar 210 MW (energía equivalente a la electricidad de tres cuartas partes de la región). Para tal efecto requiere intervenir el lugar donde confluyen los ríos Torrentoso y Manso, afluentes del Puelo.
Por eso, la comunidad organizada de Puelo, y como señala su sitio web, se ha manifestado en contra de las obras. Además, llegaron hasta el Tercer Tribunal Ambiental, con sede en Valdivia, para presentar en forma oral sus argumentos contra el proyecto hidroeléctrico Mediterráneo.
