Publicidad
Alopecia, una enfermedad más común de lo que se cree Salud

Alopecia, una enfermedad más común de lo que se cree

A diferencia de la caída normal de cabello, la alopecia es una caída anormal que puede presentarse en cualquier lugar del cuerpo por distintos motivos, vinculados a lo hormonal o bien al estrés.


Tiempo antes de empezar a raparse, la actriz, productora y conductora Jada Pinkett despertaba con el almohadón repleto de cabellos, sentía un miedo constante y entrar una ducha le causaba “terror” porque sus pelos abrazaban cada espacio: la cama, el baño, sus manos.

Su cuero cabelludo empezó a notarse y decidió pelarse y usar turbantes. Pero al ser un personaje de visibilidad pública, no tardaron en llegar los comentarios y decidió hacer pública su enfermedad: alopecia areata. 

“Hay diversos tipos de alopecia, los cuales se diferencian según sus causales. En el caso de Pinkett, su enfermedad tiene su base en un problema autoinmune, por lo cual los médicos suelen recetar el uso de inmunosupresores para reducir la inflamación y atacar la afección desde dentro”, sostuvo el dermatólogo, tricólogo y especialista en endocrinología de la Clínica SMER, Hernán Rioseco.

“No obstante, la causa más común de alopecia se relaciona con factores hormonales y afecta, en mayor cantidad, a hombres que a mujeres. Esto debido a que la testosterona, la hormona masculina por excelencia, con el paso del tiempo puede transformarse en dihidrotestosterona (DHT), provocando que los folículos pilosos del cuero cabelludo se atrofien”, explicó el especialista.

Otro origen frecuente de la enfermedad, que aumentó de manera considerable en pandemia, es la “alopecia por estrés o también llamada efluvio telógeno, que puede provocar la pérdida de más de la mitad del cabello en muy poco tiempo”.

Tratamiento

Antes de iniciar el tratamiento es necesario realizar una evaluación endocrinológica para evaluar las hormonas y a partir de los resultados se pueden utilizar distintos tratamientos.

De acuerdo a información brindada por Rioseco, los tratamientos pueden ser plasma rico en plaquetas, mesoterapia capilar, láser rojo, o terapia con células madres.

Sumado a ello, existe el “implante capilar (FUE)” que se lleva a cabo “mediante autoinjertos del cuero cabelludo, zona en la cual se encuentran los folículos que jamás se caen genéticamente”.

De la misma manera, de salir los exámenes endocrinológicos sin mayor afectación, y a nivel biológico se encuentre todo funcionando de manera correcta, estos tratamientos deben ir acompañados de atenciones psicológicas, que traten por otro lado, problemas como el estrés. 

Publicidad

Tendencias