El diputado UDI y presidente de la comisión de Transportes de la Cámara, Gustavo Hasbún, se refirió a la quiebra de la empresa de Buses Gran Santiago, llamando al ministerio del ramo a prevenir y garantizar la continuidad del servicio.
El legislador gremialista instó al titular de Transportes, Pedro Pablo Errázuriz, a que prevenga y garantice la continuidad de los servicios, ya que más de 800 mil personas se podrían ver afectadas, en zonas populares de la capital.
«Hay que garantizar el cumplimiento de los contratos, manteniendo los recorridos, y que a la larga no se siga afectando la calidad de vida de los usuarios», dijo.
Junto a esto, Hasbún espera que el ministro tome las medidas correspondientes, de manera de evitar que otras empresas puedan colapsar y se caigan del sistema, pensando en que este año se debe llamar a licitación a los alimentadores.
«Se van a tener que buscar fórmulas para coadministrar, ya que la ley actualmente faculta al ministerio de Transportes a intervenir a las empresas en caso de insolvencia», manifestó el parlamentario.
El diputado por La Florida, agregó que la quiebra de Gran Santiago, era algo que se veía venir «porque era una de las firmas con más poca solvencia y peor evaluadas dentro del sistema, y no hay que sorprenderse de lo que sucede».
«Lo grave es que, sabiendo que esta empresa no tenía solvencia económica, el año pasado se le entregaron nuevos recorridos en zonas populares como Lo Espejo, Pedro Aguirre Cerda y San Miguel; por lo tanto nos parece peculiar, por no decir raro, que el Ministerio de Transportes les haya entregado una nueva zona para su explotación, lo que demuestra que existe una situación que se debe investigar y esperamos que el ministerio tome las medidas del caso para evitar que esto siga ocurriendo», concluyó.
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