El vicepresidente del Senado, Juan Pablo Letelier (PS), rechazó la aprobación del parque Eólico Chiloé que se pretende levantar en zonas patrimoniales y de avistamiento de ballenas en el noroeste de la isla grande del archipiélago.
Junto con más de 30 organizaciones de la sociedad civil y los diputados Fidel Espinoza y Enrique Accorsi, el parlamentario, anunció la presentación de recursos de invalidación y protección frente a la resolución que autorizó la construcción de este megaproyecto.
La Comisión de Evaluación Ambiental de la Región de Los Lagos ignoró las argumentaciones contrarias al proyecto y lo aprobaron sólo con una declaración de Impacto Ambiental.
Letelier sostuvo que este caso se suma a la aprobación de Castilla y de HidroAysén.
En todos estos casos, sostuvo, «el denominador común es que no se considera a la comunidad». Señaló que este proyecto, denominado Mar Bravo, «se aprobó sin respetar la ley».
Tanto los parlamentarios como los grupos que se oponen, señalaron que aunque se trata de un proyecto de energías no convencionales se pretende hacer en zonas protegidas que son patrimonio del país.
La iniciativa afectaría a una serie de especies en peligro, como la ballena azul y el delfín austral y alterará sitios arqueológicos protegidos por la Ley de Monumentos Nacionales.
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