BRAGA
De los 632 premios Nobel de Ciencia entregados desde 1901 hasta 2021, solo 23 han sido otorgados a mujeres. Este preocupante dato representa el escenario al que se ven enfrentadas las científicas en el país. Según explica la presidenta de la Academia Chilena de Ciencias, Cecilia Hidalgo, la creación de políticas públicas es fundamental para frenar las brechas de género.
Solamente un tercio de los proyectos Fondecyt, que financian la mayor parte de la investigación científica nacional, son liderados por mujeres. Con este preocupante dato, la presidenta de la Academia Chilena de Ciencias y Premio Nacional de Ciencias Naturales, Cecilia Hidalgo, afirma que las científicas continúan afrontando una serie de desventajas en sus trabajos.
Hidalgo señala que estas brechas y sesgos son consecuencia de la desigualdad en que las mujeres desenvuelven sus carreras, en comparación a la de los hombres. Lo cual, asegura, “corresponde a un modelo estructural que las afecta y que se da a nivel internacional”.
Por ejemplo, “el sesgo se presenta en las cartas de recomendación que muchas veces los científicos extienden a sus colegas mujeres. En ellas destacan aspectos como ‘simpáticas’, en lugar de referirse a sus cualidades profesionales”, señala Hidalgo.
Por otro lado, dice que las desigualdades aumentan a medida que se eleva el grado de títulos, estudios y cargos.
La doctora explica que la cantidad de mujeres que cursan doctorados es relativamente similar a la de los hombres (43%), pero las que llegan a los grados más altos en la docencia universitaria, son mucho menos. Por ejemplo, las profesoras asociadas constituyen un 29%, mientras que las titulares solo un 22%.
Otra de las problemáticas que comenta la científica es el desconocimiento que reciben las mujeres en relación con su trabajo y proyectos. Cabe destacar, que de los 632 premios Nobel de Ciencia entregados desde 1901 hasta 2021, solamente 23 han sido otorgados a mujeres.
‘‘Hay menor reconocimiento de las publicaciones científicas lideradas por mujeres y de su capacidad para hacer avances innovadores en su campo”, sostiene, ‘‘en algunos casos se ha otorgado el reconocimiento a investigadores hombres y se ha ignorado a aquellas que trabajaron a la par en los estudios”, agrega.
De acuerdo a lo que explica Hidalgo, este desconocimiento de expertas se debe a que también ellas tienen menor acceso a cargos de liderazgo en directorios y/o conferencias. Según detalla, esto puede tener directa relación con la brecha en las labores de crianza.
“La desigual distribución de tareas entre hombres y mujeres, en asuntos como el cuidado de los hijos, les impide dedicarse a la ciencia en la misma proporción que los hombres”.
Esta sobrecarga de labores asociadas a la familia y el hogar, causa que las mujeres sean cuestionadas respecto a su compromiso con la ciencia. Una encuesta realizada por Fundación L’Oreal en Europa, reveló que más del 65% de los participantes opinaron que las mujeres “no valen para científicas de alto nivel, porque les falta interés por esta materia, así como también carecen de perseverancia, espíritu racional, sentido práctico y criterio analítico”.
Según indica Cecilia Hidalgo, la creación de políticas que impulsen la equidad es algo crucial para erradicar las desigualdades. Por ejemplo, sostiene que la creación del Consejo para la Igualdad de Género en Ciencia, Tecnología e Innovación, en el Ministerio de Ciencia, es un paso sumamente significativo.
El Consejo para la Igualdad tiene como objetivo de asesorar al ministerio en el diseño, implementación y seguimiento de una política y plan de acción que permitan construir un sistema nacional de Investigación, Desarrollo e Innovación (I+D+i) sin brechas de género.
Por último, la científica detalla que desde la Academia Chilena de Ciencias también se han comprometido a contribuir al cambio en favor de las mujeres. Por ejemplo, con la entrega del Premio Adelina Gutiérrez, para jóvenes cuyo trabajo es de excelencia.
