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Óleo sobre monocopia de Francisco Hoffmann La exposición estará abierta hasta el 4 de septiembre

Óleo sobre monocopia de Francisco Hoffmann

Pasado los 70 años, el pintor chileno Francisco Hoffmann se declara un marginal de la cultura. Afirma que a su edad ha ganado una nueva perspectiva del mundo y las cosas, y ese entendimiento nuevo y profundo lo traspasa a sus pinturas.


Óleo sobre monocopia de Francisco Hoffmann

Óleo sobre monocopia de Francisco Hoffmann

A sus setentaitantos, el pintor chileno Francisco Hoffmann no se cansa de crear y de parar sus antenas. Está en un período, dice, en que ha cobrado un nuevo entendimiento del mundo, en que ha logrado una síntesis que antes le habría sido imposible de descubrir o llegar a saber.

En sus pinturas emplea la técnica de la monotipia intervenida con óleo, en la que combina el grabado con la pintura al óleo. La monotipia es el resultado del grabado de un dibujo espontáneo y único, realizado con tintas de impresión sobre una plancha de metal e impreso sobre papel, que permite atrapar un instante que se traduce en la imagen resultante.

Las obras que componen esta exposición, que será inaugurada hoy martes 20 en la galería de arte Posada del Corregidor, son el resultado de trabajos realizados por el artista durante una estadía en Barcelona y concluidos en los bellos parajes de Caleu. Además, incorpora poemas de su autoría que recogen su reflexión estética y que se tradujeron en un libro que será presentado en esta misma ocasión.

Si bien en sus anteriores exposiciones en Chile y en el extranjero el trabajo de Hoffmann ha privilegiado la técnica del óleo, hoy incursiona en una técnica mixta de grabado y óleo sobre papel. El pintor explica que “la técnica se llama monocopia a monitipia y consiste en dibujar o pintar sobre una plancha de metal con tintas de imprenta y al igual que un grabado se imprime sobre un papel pasándolo por una prensa (esta técnica permite solo copias únicas de ahí su nombre)”.

El porqué de emplear esta técnica, Hoffman lo traduce así: “Ocupo esta técnica porque refleja lo que me pasa en ese momento determinado de creación, refleja esa emoción humana, lo que está pasando por mí, es como largar la sensación de un momento para otro, de un viaje interior que se lanza para afuera quizás hasta dónde”.

Para él no hay diferencia entre lo figurativo y lo objetivo,todo es una representación”, todo lo que le llega es una representación de algo, y ejemplifica: “Una puesta de sol es una representación, o sea que en el fondo esa diferencia entre objetivo y figurativo no existe, porque yo parto de una idea más bien filosófica en que desaparece esa distinción”.

La muestra se inaugurará el 20 de agosto a las 19.30 horas en la galería de arte Posada del Corregidor, Esmeralda 749, Santiago, y estará abierta hasta el 4 de septiembre.

 

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