CULTURA
Obra ganadora “Nielan Mapu”, video performance, de Rodrigo Castro Hueche
El Tercer Encuentro de las Culturas se extenderá entre el 25 de octubre y el 4 de noviembre en el Museo de Arte Precolombino, y contempla la exhibición de 15 obras, entre ellas los 3 primeros lugares seleccionadas por un jurado especializado a partir de una convocatoria nacional.
Un total de 15 obras de artistas indígenas contemporáneos formarán parte del Tercer Encuentro de las Culturas 2018, muestra organizada por el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio. Esta exposición estará abierta al público entre el jueves 25 de octubre y el domingo 4 de noviembre en el Museo de Arte Precolombino de Santiago, con entrada liberada.
“El Encuentro de las Culturas busca posibilitar el debate, la valoración y reflexión respecto de la diversidad de las expresiones culturales vigentes de los pueblos indígenas en Chile”, comentó el Subsecretario del Patrimonio Cultural, Emilio de la Cerda.
Las obras escogidas (primero, segundo y tercer lugar, además de 12 obras seleccionadas), resultaron del veredicto de un jurado especializado en artes visuales contemporáneas que dirimió entre un conjunto de casi cincuenta obras en formato audiovisual, pinturas, esculturas e instalaciones, entre otros lenguajes.
El concepto articulador de esta versión del Encuentro de las Culturas es “Estéticas de la diferencia. Tradiciones indígenas: representaciones e inflexiones”. Esta idea propone asumir la creación indígena contemporánea como un lenguaje, que al referenciar y resignificar a través de la obra de arte distintos aspectos de la tradición cultural de un pueblo originario, posibilita su reactualización y al hacerlo, cuestiona y reflexiona acerca de la cultura propia de la cual el/la artista forma parte.
La muestra además contará con la participación como invitado de Bernardo Oyarzún, consagrado artista mapuche, quien además de poseer una dilatada y reconocida trayectoria, representó a Chile en la Bienal de Arte de Venecia 2017.
El Encuentro de las Culturas 2018 además contará con un equipo de mediación que acercará las propuestas presentadas por los artistas a los visitantes. La exposición se mantendrá abierta al público hasta el domingo 4 de noviembre en el Museo de Arte Precolombino, ubicado en Bandera 361, Santiago, entre las 10:00 y las 18:00 horas.
Nielan Mapu (“no tengo tierra en mapuzugun”), del autor Rodrigo Castro Hueche, es una obra en formato audiovisual, que en clave de performance, se entremezclan el registro audiovisual del tránsito por distintas locaciones de la ciudad de Santiago de la obra “errante”, consistente en un mueble velador intervenido con simbología mapuche y la instalación de la misma en una exposición del propio autor en una de las salas del Centro Cultural Estación Mapocho.
Artista Rodrigo Castro Hueche. Fotografías gentileza Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio
Este periplo posibilita el desarrollo de una reflexión acerca del desarraigo mapuche urbano en clave de artes visuales contemporáneas. Una sucesión de imágenes cargadas de alto sentido estetico y metafórico, reflejan de manera suscinta pero a la vez profunda, uno de los hitos históricos contemporáneos más cruciales y desafiantes para los pueblos indígenas.
“Mongeley taiñ dungun” (“está viva nuestra lengua en mapuzugun). Es un video que, en clave de performance, aborda cuatro temas: la lengua; sus pérdidas y procesos de revitalización; las yerbas medicinales tradicionales mapuche; la historia y la sobreexplotación de la tierra.
La lengua mapuche cruza toda la obra, a través del propio rostro de la artista, reproducido 4 veces en una secuencia lineal. Rostro que es solo gesto expresivo, pero que en un relato en off subtitulado, apela directamente a la preservación del idioma y su necesaria y urgente transmisión oral. La segunda muestra una lengua con una hoja de lawen (planta medicinal), reflejando cómo la medicina ancestral está inscrita en nuestros cuerpos. En un tercer momento, la lengua aparece escrita con la palabra “dungun” (lengua) que hace apelación a la memoria viva de los hechos antiguos y su necesaria reescritura. Por último, la explotación de la tierra se evidencia con una boca que derrama monedas en un gesto sin voz.
La obra audiovisual apela, a través del propio cuerpo y gesto repetido 4 veces de la artista, (cuerpo champurria, es decir mezclado, mixturado) a la condición femenina como territorio subalterno de mujer mapuche, heredera de la diáspora y la negación.
Esta obra es una instalación compuesta, conformada por un díptico fotográfico acompañado por una bolsa ziploc con piedras de la Plaza de Armas y un Mp3 con testimonios de jóvenes mapuche.
Esta instalación toma como referencia una obra escultórica ubicada en una de las esquinas de la Plaza de Armas de Santiago. Dicha obra fue emplazada allí luego de un concurso público convocado por la Municipalidad de Santiago con motivo de los 500 años de la llegada de los europeos a América. La escultura, denominada originalmente como “Al Pueblo Indígena”, con el tiempo ha sido apodada como «Cabeza del Indio», habiendo suscitado desde que se instaló, múltiples opiniones que van desde la indiferencia al rechazo explícito, puesto que su forma de cabeza fragmentada, para algunos mapuche, rememoraría el año 1557, fecha en que posterior al asesinato de Leftraru (uno de los principales héroes mapuche del siglo XVI), estuvo exhibida su cabeza como trofeo de guerra en esa misma Plaza de Armas.
Esta obra problematiza los espacios públicos de representación indígena y el contexto en el que estos se han erigido, contexto que está plenamente abierto en la actualidad
