
Este viernes, seis estudiantes del liceo Enrique Molina en Concepción, se convirtieron en los primeros expulsados bajo la ley Aula Segura, luego de verse involucrados en una agresión a dos funcionarias del colegio.
Al respecto, la ministra de Educación, Marcela Cubillos, sostuvo que "cuando aprobamos Aula Segura, dijimos que íbamos a combinar el derecho a la comunidad a poder trabajar y estudiar en paz, el derecho a un debido proceso, como se les aplicó a estos estudiantes, y el derecho a la educación de los alumnos expulsados de contar con las ayudas para ser reubicados en otros establecimientos. Pero aquí la señal es clara: no más agresiones a profesores y a asistentes de la educación".
Desde el Ministerio de Educación explicaron que "a cada uno de los apoderados, entre ayer y hoy, se les entregó una carta (...) cuatro de ellos aceptaron la medida y los otros dos tienen un plazo de 5 días para apelar al mismo colegio".
Además, sostienen que "el proceso se llevó de acuerdo a lo contenido en los instrumentos respectivos que rigen las conductas, dando espacio a la defensa y debido proceso, según los antecedentes expuestos por el rector, y se aplicó la medida de expulsión".
La ley Aula Segura aumenta las facultades de los directores de los colegios, permitiéndoles expulsar o cancelar la matrícula de aquellos alumnos que se vean involucrados en casos de violencia extrema.