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Un montante récord de 36,89 billones de yenes (269.810 millones de dólares), la mayor cantidad de la historia, ha sido incluido en el presupuesto para aumentar los gastos en seguridad social en un intento de hacer frente al rápido envejecimiento de la población de Japón.
La Cámara Baja del Parlamento de Japón aprobó hoy martes un presupuesto récord de 114,38 billones de yenes (836.900 millones de dólares estadounidenses) para el año fiscal 2023, con una asignación récord para los gastos en seguridad social, mientras que el controvertido gasto de defensa ha sido tomado en consideración pese a la desalentadora situación fiscal del país.
Un montante récord de 36,89 billones de yenes (269.810 millones de dólares), la mayor cantidad de la historia, ha sido incluido en el presupuesto para aumentar los gastos en seguridad social en un intento de hacer frente al rápido envejecimiento de la población de Japón.
El presupuesto del Gobierno también incluye 6,82 billones de yenes (49.880 millones de dólares) en gastos de defensa.
Esto último forma parte de los planes del Gobierno para reforzar sus capacidades defensivas, con el plan quinquenal más amplio que ha recibido duras críticas de la opinión pública, los partidos de la oposición y los académicos, en gran parte debido a que el plan es contrario a la postura pacífica de la Constitución de Japón.
Para el año fiscal a partir de abril, los ingresos no fiscales se utilizarán para financiar los gastos en defensa del Gobierno, según el presupuesto.
Sin embargo, a partir del año fiscal 2024 o más adelante, un criticado aumento de los impuestos sobre las empresas y la renta, así como un incremento de las tasas a algunos bienes de consumo, se utilizarán para financiar los polémicos planes de gasto en defensa más amplios de Japón.
Para financiar el presupuesto estatal, el Gobierno nipón emitirá 35,62 billones de yenes (260.530 millones de dólares) en bonos, que se sumarán a la deuda nacional de Japón, la cual es más del doble del tamaño de su economía y la peor entre los países industrializados.
Tras la aprobación de la más poderosa Cámara Baja, controlada por la coalición liderada por el gobernante Partido Liberal Democrático (PLD), el presupuesto entrará automáticamente en vigor 30 días después de que comiencen las deliberaciones en la Cámara Alta del Parlamento bicameral de Japón.
