Opinión
Según la actual legislación, salvo excepciones, toda propiedad nueva que no sea adquirida con subsidio del Minvu se encuentra afecta al pago de IVA, es decir, todas aquellas unidades con precios superiores a las 2.200 UF deberán pagar este impuesto. El problema es que hay evidencia de que una familia de 4 personas con residencia y trabajo en la Región Metropolitana necesita a lo menos una propiedad de 2 dormitorios – de unos 60 m2- para vivir dignamente. Un inmueble así, en un sector con conectividad aceptable, difícilmente tendrá un precio inferior a las 2.900 UF.
Dado lo anterior se desprende que con el actual IVA le estamos haciendo más pesada la mochila a la gente de clase media que compra sin subsidio y, más encima, estamos dejando pasar la oportunidad de recaudar más de quienes más tienen.
En este nuevo contexto social creo que es fundamental crear impuestos progresivos con el objetivo de lograr una transferencia de recursos entre los distintos segmentos del mercado.
En concreto, propongo reemplazar el IVA a las propiedades nuevas por un “impuesto con tramos”, similar a la estructura del global complementario. Así, por ejemplo, las propiedades de hasta 3200 UF podrían estar exentas de este tributo; aquellas entre las 3201 UF y 7000 UF podrían pagar el actual 19%, y aquellas con precios entre las 7001 y 14.000 UF una tasa del orden del 27%. Todas las unidades con valores sobre las 14.000 UF podrían tributar con una tasa propuesta del 35%.
Creo que una medida de este tipo, puede ayudar a nivelar la cancha y a hacer un Chile más justo.
