Para el prestigioso banco suizo, la mejor forma de hacer negocios es en familia.
En el informe llamado «The Family Business Model: Credit Suisse Family 900 Universe», Credit Suisse analizó el comportamiento de 900 empresas familiares de todo el mundo, y los resultados llaman la atención.
El índice se construyó con 920 empresas listadas en bolsa, donde la familia fundadora controla como mínimo el 20% de la propiedad y una capitalización bursátil de al menos US$1.000.
La empresas con estas características, repartidas por 35 países, se encuentran en su mayoría en Asia, pero resalta la aparición de algunas en Chile, Perú, Brasil y México.
Según el estudio, la contribución de las empresas familiares al PIB es de un 57% en Estados Unidos, 70% en Europa, 34% en Asia y 60% en América Latina.
Pese a esto, los resultados muestran que solo un tercio de las empresas familiares logra pasar a la segunda generación, un 12% a la tercera y sólo el 3% a la cuarta.
Credit Suisse apunta, además, a que en el período 2006-2015, las empresas familiares fueron un 4,5% más rentables que las empresas listadas en el Morgan Stanley Capital International (MSCI), el cual considera la renta variable global.
Según la entidad suiza, de esto se concluiría que invertir en acciones de empresas familiares versus las que no lo son, se traduce en mayores rentabilidades.
