Un estudio de Trabajando.com detalla también que tras una movilización el 81% de los trabajadores ha recibido un bono de término de conflicto, cuyo promedio a nivel nacional es de poco más de 700 mil pesos.
En medio de la discusión de la Reforma Laboral y del debate sobre quorum que se requiere para la conformación de sindicatos, el portal Trabajando.com dio a conocer un estudio que de alguna manera echa por tierra los argumentos de un sector del empresariado que ve con malos ojos la organización sindical de sus trabajadores.
Se trata de una encuesta realizada a 1.500 usuarios de ese portal, de los cuales el 65% aseguró que en su lugar de trabajo existe un sindicato, contra el 35% que indicó que no se había creado.
En cuanto a la pertenencia, el 49% dijo que formaba parte de la organización, mientras que el 51% indicó que no lo había hecho.
Y si bien el 85% afirmó que en sus respectivas empresas se había realizado una negociación colectiva dentro de los últimos dos años, sólo el 22% dijo que ésta había terminado en una huelga, mientras que el 20% dijo que sólo en algunos casos y una amplia mayoría de 58 por ciento señaló que nunca se debió recurrir a esa medida de presión.
Al finalizar las negociaciones colectivas, el 81% aseguró haber recibido bono de término de conflicto, mientras que un 19% lo contrario. El monto promedio, de estos bonos entregados por término de conflicto en las empresas en Chile, es de $742.692.
Sobre estos resultados, el gerente general de Trabajando.com, Álvaro Vargas, afirmó que el tema de la organización sindical debe ser aprovechada como “una oportunidad para las empresas”.
“El éxito de una organización tiene que ver con el bienestar que experimente los trabajadores. La agrupación de colaboradores para hacer valer sus derechos y manifestar sus demandas laborales es algo bueno, sin embargo, las empresas deben adelantarse a estos y velar por el bienestar de su gente”, dijo.
}Y agregó que los departamentos de recursos humanos debieran “propiciar y mantener una conducta orientada a generar ese equilibrio, equidad y valoración que merece la gente en cualquier puesto de una organización. Si este departamento no lo hace, es totalmente normal y esperable, que un sindicato se haga cargo y lo exija”.
