En entrevista con El Mostrador Mercados, el socio de la consultora Gemines responsable de los estudios de mercado y de opinión pública dice que esa elite no ha entendido que la gente no necesariamente quiere grandes acuerdos, y sigue “volcada hacia sí misma, en sus mismas conversaciones, y que hizo una especie de alto, una especie de volver a una ceremonia republicana utilizando el tema del Presidente Aylwin”. Acerca de las reformas, señala que «nadie tiene demasiado claro si este Gobierno ha hecho poca reforma o mucha reforma”.
Guido Romo es el socio de la consultora Gemines responsable de los estudios de opinión pública y de mercado.
Sus informes sirven para dar contexto a la toma de decisiones de los clientes de la influyente consultora, entre los cuales se encuentran las principales entidades financieras del mercado.
En ese papel, Romo ha venido siguiendo la forma en que tanto la elite política como el poder económico han llegado a lo que hoy se describe como una crisis de legitimidad.
La semana pasada, en un informe paras sus clientes en la previa del discurso del 21 de mayo de la Presidenta Michelle Bachelet, Romo dijo que “las elites siguen ciegas”.
En una extensa entrevista con El Mostrador Mercados, el experto se explaya sobre ese tema y hace un análisis crítico del actual clima político y empresarial. “Hay una elite –más política que económica– absolutamente mirándose el ombligo”. Agrega que dicha elite no ha entendido que la gente no necesariamente quiere grandes acuerdos, y sigue “volcada hacia sí misma, en sus mismas conversaciones, y que hizo una especie de alto, una especie de volver a una ceremonia republicana utilizando el tema del Presidente Aylwin”.
Acerca de las reformas, Romo dice que «nadie tiene demasiado claro si este gobierno ha hecho poca reforma o mucha reforma”.
Agrega que “yo creo que el sector privado ve más hacia la orientación de que hubo cambios y que golpearon los cambios, sobre todo en lo que se llama el clima de negocios o el clima de confianza en los negocios. Creo que el sector privado se siente resentido en eso”.
Puntualiza que “de alguna manera volvieron las viejas dos almas que se habló hace años, cuando existía la Concertación. Esas dos almas siguen presentes, llámense Concertación o Nueva Mayoría, y hoy día se está siendo más franco. Está Revolución Democrática sacando a su gente del gobierno, o a algunos, los más conocidos, es un mensaje claro. Está el movimiento del diputado Boric. Entonces hay otras voces que están apareciendo que hasta hace un tiempo habrían estado contenidas en la Nueva Mayoría”.
Romo opina que el sector privado ha sido lento en asumir los cambios, pero que hay señales de que está reaccionando. “ Es así, y lo que hay que pensar, creo yo, es que cuesta mucho cambiar. Cuesta mucho decir ‘no voy a leer El Mercurio’, ‘no voy a dar una entrevista en tal medio’, etc. y volcarse hacia otro modelo en el que todavía no tienes simplemente las destrezas. Hay un tema etario importante, por cierto. Lo que yo creo que pasó en los empresarios, en los gerentes, en los CEO, es que se asumió que iban a haber cambios. Se entendió que iban a ocurrir cambios, Bachelet fue bastante franca en su programa, estaban las tres grandes reformas, alguna vez las hablamos, la reforma tributaria, la educacional y la laboral».
–Y la constitucional
-Entonces ha habido una disposición. Yo en las conversaciones que tuve en ese minuto había, sobre todo en el tema de reforma tributaria, una claridad de que iba a venir algo. Pero simplemente, al parecer la forma, generó un ruido mayor del esperado e hizo que este mundo se pusiera además en reserva. Y hoy día qué ocurre, hoy día simplemente este Gobierno está en la mitad del río. Mira hacia atrás y le quedan exactamente dos años y mira hacia delante y le queda eso y un poco más. Por tanto, no es mucho lo que puedes esperar de lo que quiere hacer, hacia lo que le queda.
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