El cobre tiene margen para apreciarse desde los niveles actuales, respaldado por la creciente demanda del metal en todo tipo de artículos, desde teléfonos inteligentes hasta vehículos eléctricos y de conducción autónoma, según la mayor fundición de Japón.
Los precios subirán a más de US$7.150 la tonelada métrica para finales de este año como mínimo, y es probable que haya volatilidad en la negociación, dijo Shigeru Oi, presidente de JX Nippon Mining & Metals Corp., en una entrevista en Tokio el jueves. El metal se ha apreciado más del 60 por ciento desde su caída a un mínimo de varios años a principios de 2016. Los inversores de minas están «respirando con alivio», dijo el presidente de Furukawa Co., Naohisa Miyakawa, que no anticipa una caída de los precios por debajo de unos US$6.500.
«Se esperan altibajos este año, pero creo que la tendencia alcista del mercado no cambiará», dijo Oi en una reunión de Año Nuevo de la industria minera de Japón.
Los niveles de precios actuales aún no son lo suficientemente altos como para que las mineras tengan confianza para comenzar proyectos de desarrollo y, en teoría, necesitarían un nivel más cerca de los US$8.000 por tonelada para cubrir costes, dijo Oi. JX Nippon Mining, negocio de refino de petróleo de JXTG Holdings Inc., tiene una participación mayoritaria en Pan Pacific Copper Co., que a su vez es propietaria de la mina de cobre Caserones en Chile.
Miyakawa, del fabricante de productos Furukawa, dijo que el cobre probablemente no suba a US$8.000 la tonelada. Si bien el metal está en una buena posición a largo plazo, no es probable que el precio suba a corto plazo, ya que llevará tiempo triplicar o cuadruplicar el uso en vehículos eléctricos.
El cobre en la Bolsa de Metales de Londres se ha apreciado más de un 20 por ciento en el último año y se negociaba a US$7.145 la tonelada a las 2:30 de la tarde en Tokio.
