MERCADOS
El consejo de la entidad dirigida por Mario Marcel decidió elevar la tasa de interés en un cuarto de punto conforme los responsables de política monetaria miran más allá de la inflación, por debajo del objetivo, hacia unas expectativas de crecimiento e inversión fuertes.
El Banco Central finalmente decidió elevar los costes de endeudamiento al 3 por ciento, en una decisión unánime anticipada por los 21 analistas de una encuesta de Bloomberg. En un comunicado que acompañaba la decisión, los responsables de política dijeron que la economía se volvió más dinámica en el cuarto trimestre y reiteró que su ciclo de normalización será gradual y cauteloso.
Las recientes cifras de crecimiento de Chile han superado las previsiones de los analistas por la expansión de la minería. Asimismo, la caída del desempleo está impulsando la demanda. Si bien la inflación general, por debajo del objetivo del tres por ciento, se atribuye a unos menores costes del petróleo, un indicador clave de precios que excluye los volátiles alimentos y energía han estado aumentando desde mayo. Para los inversores, estos factores significan que los días de inflación más moderada probablemente están contados.
«El banco central está en una misión para normalizar la postura de política monetaria mediante la eliminación de estímulos», dijo Á lvaro Mollica, estratega macro de XP Investments en Nueva York, antes de la decisión de la tasa. «La inflación subyacente, la lectura preferida por el banco central dada su relación con la actividad económica, está aumentando lentamente y los datos de la actividad económica no se han debilitado».
Los menores costes de alimentos, bebidas y gasolina de diciembre llevaron a la primera deflación mensual de Chile desde 2017, una lectura que muchos analistas consideraron algo temporal. Entretanto, el aumento del 3,1 por ciento en la actividad económica de noviembre respecto al año anterior, un resultado que fue más alto que el pronóstico de todos menos un analista, impulsó los swaps de tasas de interés.
Los operadores esperan que los costes de préstamos alcancen el 4 por ciento en los próximos dos años, según una encuesta del banco central del 25 de enero, mientras que otra encuesta de economistas muestra un crecimiento del PIB del 3,6 por ciento este año.
Las razones para una política monetaria cautelosa son muchas. Las ventas al por menor en la capital, Santiago, registraron la mayor contracción en diez años en 2018, según la Cámara de Comercio. El riesgo de una guerra comercial mundial amenaza el precio del cobre, la principal exportación del país y también el crecimiento económico en China, que es el principal socio comercial del país.
Pese a estos riesgos, el banco central está dando más peso a los indicadores nacionales que muestran un fuerte crecimiento, según Felipe Hernández de Bloomberg Economist. «Los resultados apuntan a que el banco central está reduciendo lentamente la relajación monetaria tras una pausa el mes pasado», dijo antes del anuncio de la tasa.
