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Opinión: la resolución de La Haya no determinará el cese de las negociaciones


Por Daniel Contreras, MBA de Harvard, es Socio y gerente general de Falcon.

La diferencia hoy está concentrada sobre 35,000 Km2 de mar que reclama el Perú.  Esto les permite a ambos países, reclamar sobre cualquier otra fracción de territorio a futuro y en concreto al Perú, instalar un mecanismo de negociación a futuro que quedará legitimado por las partes. Esto también es válido para cualquier otro país que desee reclamar territorio y es complementario a la existencia de acuerdos históricos.

Siendo Perú el que reclama, las rondas de presentaciones, dos en total, son siempre abiertas por Perú y respondidas por Chile, con algunos días de diferencia. Esto le da una ventaja al país sureño en la preparación de los argumentos.

Hay diferencias importantes en los estilos negociadores. El peruano es más transaccional, de corto plazo, objetivo y transparente en sus planteamientos. El chileno es más atrapado en las emociones y opaco en su argumentación.

Ambos equipos negociadores son de primer nivel. Los antecedentes familiares del ex canciller García-Belaúnde pueden aumentar su compromiso emocional con el conflicto, versus los del chileno Von Klaveren, que deberían incidir en que su postura negociadora fuera más fría.

EL FALLO

La corte, consciente del problema de política interna que genera, debería fallar no sólo en base a un criterio técnico, sino considerando el impacto para cada parte. Debería entregar parte de lo reclamado a Perú, menos de 17,500Km2. Lo que sería un triunfo a exhibir internamente. Para Chile también es un triunfo, le quitaron menos de la mitad. Debería haber además compensaciones de Perú a Chile, onerosas, de manera que el problema, aumentado de otras partes que quisieran tener conflictos en el futuro con Chile, se vea disminuido.

Como precedente existe el fallo del litigio entre Colombia y Nicaragua, en el que si bien la Corte de la Haya estableció soberanía terrestre colombiano sobre las islas en disputa, el tribunal también anunció que ahora corresponden a Nicaragua extensas zonas de las aguas que rodean a los cayos de Quitasueño y Serrana.

Para Perú el foco debería estar en las compensaciones, como asegura la compra de territorio y de un éxito en materia de negociación internacional, esto está en línea con el estilo de negociación transaccional.

El foco de Chile debería estar en las compensaciones, esto saca la negociación de un esquema distributivo, a uno de creación de valor. Existen múltiples fichas de intercambio dadas por la relación bilateral: inversión extranjera, migraciones, déficit o superávit energético, etc. Lo anterior, en caso de un fallo negativo.

Las preguntas son: ¿cuánto vale un Km2 de mar? Cuál será la moneda de pago? ¿Cuál es un precio aceptable a pagar, pero que al mismo tiempo desincentive futuras invitaciones a cortes internacionales?

En conclusión la Corte debería además del fallo, declarar que existirán compensaciones que se resolverán a futuro, lo que hará que continúen las negociaciones y que el resultado se prolongue más allá de los gobiernos actuales, de manera de no perjudicar a nadie.

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