Sin el voto de los minoritarios, Julio Ponce consiguió que se aprobaran los aumentos de capital de las sociedades Cascadas Oro Blanco y Norte Grande. El total es de de US$ 212 millones y se necesitan para pagar un bono de Deutsche Bank y así evitar caer en default.
Ambas operaciones fueron rechazadas por las AFP, Moneda, BTG Pactual y Consorcio, los principales accionistas minoritarios. Su rechazo se basa en su disconformidad con los estados financieros de las Cascadas y en los cargos de las SVS contra Julio Ponce y su círculo, con el cual controla las cascadas y SQM.
El representante de Moneda, Vicente Bertrand, dijo que los "estados financieros están sujetos a sufrir profundas modificaciones a la luz de los acontecimientos descubiertos por la SVS". AFP Capital dijo que no hay información suficiente.
AFP Provida dijo que hay escasa información financiera respecto de la compañía y Habitat basó su rechazo en que no es posible un aumento de capital sin antes conocer la verdadera situación patrimonial de la empresa.
Ahora los minoritarios deben decidir si acuden al aumento de capital y apuestan a que la crisis se solucione, o se niegan y aceptan diluirse. Pero eso conlleva riesgos, ya que los aportantes de las AFP o clientes de Moneda y Consorcio podrían sentirse perjudicados por la decisión y acudir a tribunales.
Capital ya dijo que no iría al aumento de capital. Estima que "no están dadas las condiciones necesarias para decidir, en el marco adecuado, respecto de la propuesta de aumento de capital que se ha formulado" y por eso "y cumpliendo con su deber de velar por el interés de los fondos que administra, que AFP Capital S.A. rechaza la propuesta de aumento de capital de la sociedad".
En los próximos días deberíamos saber lo que decide hacer el resto de los minoritarios que tanto han criticado las operaciones.
De acuerdo a un reportaje de El Mercurio, las Cascadas de SQM tienen prendadas acciones por US$ 3.185 millones ante entidades financieras. La más complicada sería Potasios.
