Las cifras sectoriales publicadas la semana pasada por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) apuntan a una economía que sigue creciendo por debajo el 3%.
El consenso de los economistas es que el Imacec de abril que se publica hoy mostrará un aumento de la actividad económica en abril de entre 2,3% y 2,8%.
El BICE señala que las cifras confirmaron el débil desempeño de la economía, en "donde destacó la fuerte desaceleración del comercio. Así, proyectamos que el Imacec de abril presentaría un alza anual de 2,8%".
Matías Madrid del Banco Penta proyecta una variación de 2,3%, "con lo que en los 4 primeros meses del año la economía habría crecido un 2,5%, por debajo de un PIB potencial estimado".
Ayer, Rodrigo Vergara, presidente del Banco Central, anticipó un recorte en previsión de crecimiento para 2014 en el Informe de Política Monetaria de junio que presentará el lunes.
"En un contexto de bajo dinamismo de la actividad no sería extraño esperar un recorte en la proyección del PIB (Producto Interno Bruto), declaró Vergara al intervenir en un encuentro de empresarios en la ciudad de Viña del Mar.
La economía chilena enfrenta una fase de desaceleración desde el 2103, la que se ha acentuado este año debido a una baja en la inversión por el término de importantes proyectos mineros, a lo que se suma una caída en el valor de su principal exportación, el cobre, asociada al menor dinamismo de China.
El Gobierno ya redujo su proyección de crecimiento para el 2014 desde un 4,9 a un 3,4 %, aunque espera un repunte en el 2015.
Vergara señaló que el escenario externo no muestra cambios sustantivos y advirtió sobre la presencia de varios riesgos, entre ellos, dudas sobre el desempeño de las economías emergentes.
Al referirse al comportamiento de la economía chilena, Vergara expresó que ésta muestra una desaceleración de la actividad y la demanda, con una inflación que ha aumentado más que lo previsto.
Sin embargo, indicó que, aunque actualmente la inflación anual se ubica por sobre el rango meta de 2,0 a 4,0 %, se prevé que el alza en los precios domésticos sea transitoria, producto de la misma desaceleración de la actividad.
