MERCADOS
Crédito: Agencia UNO
Según el acta, en la reunión de directorio, Ignacio Cueto sostuvo que “hoy en día, la compañía necesita protección de sus acreedores y otras partes interesadas, que se refleje en una suspensión temporal de ejecución, al mismo tiempo que poder continuar operando con sus principales activos, proveedores, partes financistas, reguladores y trabajadores, mientras estructura una reorganización vinculante para ser viable financieramente en un escenario post pandemia”.
Según un acta de Latam, la decisión de acogerse al Capítulo 11 de la Ley de Quiebras de Estados Unidos, fue tomada por el directorio de manera «unánime». Además, el presidente de la compañía, Ignacio Cueto, justificó la decisión debido a «la posibilidad de que ciertos acreedores de Latam decidieran ejercer acciones de cobro forzado, ante la imposibilidad de la aerolínea de remediar incumplimientos».
En la última asamblea del directorio, el presidente de la compañía, Ignacio Cueto, informó que la empresa estuvo casi dos meses analizando y explorando una alternativa de renegociación con sus acreededores, según consigna el Diario Financiero.
En ese sentido, el mandamás de Latam, justificó que la decisión de iniciar este proceso de reestructuración de deuda se debió a «la posibilidad de que ciertos acreedores de Latam decidieran ejercer acciones de cobro forzado, ante la imposibilidad de la aerolínea de remediar incumplimientos».
Según el acta, en la reunión de directorio, Cueto sostuvo que “hoy en día, la compañía necesita protección de sus acreedores y otras partes interesadas, que se refleje en una suspensión temporal de ejecución, al mismo tiempo que poder continuar operando con sus principales activos, proveedores, partes financistas, reguladores y trabajadores, mientras estructura una reorganización vinculante para ser viable financieramente en un escenario post pandemia”.
Apenas se apruebe la propuesta de Latam, sus operaciones y reorganización serán supervisadas por el tribunal de Estados Unidos. Posteriormente, la justicia formará uno o más comités que vayan en representación de los acreededores, accionistas y la empresa con el fin de armar un plan (con un plazo de 120 días extensibles) que estabilice en alguna medida sus finanzas.
