Si bien el hospital francés donde se encuentra internado desde el viernes pasado el líder palestino negó su muerte, admitió que se encuentra en un estado de salud «complicado». Sin embargo, no indicó cuál es su real nivel de gravedad, ni tampoco si entregara un nuevo parte médico.
El líder palestino, Yasser Arafat, «no ha muerto», anunció hoy un portavoz del hospital militar de Percy, en Clamart, a las afueras de París, donde se encuentra internado desde el viernes pasado como consecuencia de una descompensación.
La institución médica salió al paso de una serie de versiones de medios de comunicación israelíes, que aseguraron que Arafat estaba «clínicamente muerto». Ese trascendido incluso fue recogido por el primer ministro de Luxemburgo, Jean Claude Juncker, quien más tarde debió desdecirse.
«No ha muerto», aseguró un vocero del recinto asistencial, general Christian Estripeau, en una escuetísima comparecencia ante los numerosos medios de comunicación que se encuentran en el recinto asistencial, aunque sí admitió que se encuentra en un estado «complicado».
En ese mismo sentido, el Ministerio francés de Defensa, del que depende el establecimiento médico, aseguró que el líder se encuentra en reanimación y con ventilación mecánica.
Según Estripeau, la situación clínica que presentaba el líder palestino, de 75 años, en los primeros días después de su ingreso se ha vuelto «más compleja», por lo que fue trasladado ayer a «un servicio adaptado a su patología» para recibir tratamientos acordes a su condición de salud.
El médico no describió el estado de Arafat, ni precisó la patología, ni reveló si estaba intubado en el servicio de reanimación, como habían afirmado horas antes fuentes médicas francesas.
Fuentes médicas francesas indicaron que el líder palestino fue sometido a un electroencefalograma, ya que es el único medio de ver si aún hay vida en un paciente en coma profundo.
En tanto, el primer ministro palestino, Ahmed Qurea, -Abú Alá- también negó el fallecimiento de Arafat, pero el jefe del equipo del líder palestino, Ramzi Khoury, reconoció que se encuentra «muy grave».
Los rumores sobre una seria recaída del líder palestino, de 75 años, cobraron más fuerza a primera hora de este jueves, cuando un parte médico que se esperaba para las 10:00 GMT fue cancelado sin ninguna explicación.
En las primeras horas de hoy, los voceros palestinos que acompañan a Arafat informaron sobre un deterioro en su salud, pero con el correr de los minutos comenzaron a surgir frases como «condición crítica» y «cuidados intensivos».
«El presidente Arafat perdió el conocimiento tres veces… Las primeras dos lo recuperó, pero no sabemos que ha ocurrido en la última ocasión», decía uno de sus acompañantes, mientras que el gobierno israelí señalaba que había sido informado por las autoridades palestinas del «fuerte deterioro» en las condiciones de Arafat.
Traslado a Palestina
En tanto, la Autoridad Nacional Palestina (ANP) realiza gestiones para trasladar por a Arafat a los territorios palestinos, ya sea Gaza o Cisjordania, para morir, según su última voluntad.
Si bien Israel no se ha pronunciado al respecto, sí ha señalado que Arafat no será sepultado en tierras israelíes, ni siquiera en Jerusalén, ciudad sin soberanía definida. En esa línea, ya diseñó un plan de contingencia, incluida la posibilidad de actuación militar en caso de las protestas que pueden derivarse de la intención de enterrar al «rais» en Jerusalén.
El llamado por los palestinos «Noble Santuario» o «Explanada de las Mezquitas», bajo control palestino y tercer lugar sagrado del Islam, alberga la mezquita de al-Aksa con un mausoleo en su interior, donde Arafat quisiera ser sepultado.
En tanto, miembros del movimiento palestino al-Fatah y de la Organización de Liberación Palestina (OLP) se reunieron de urgencia en Ramala debido a la recaída en el estado de salud de Arafat.
Actualmente, dos hombres están a cargo de la Autoridad Nacional Palestina, el primer ministro Ahmed Qorei, y su antecesor en el cargo, Mahmoud Abbas (Abu Mazen). Éste último suspendió un viaje a París que pensaba realizar este jueves para visitar a Arafat.
Diagnóstico
El presidente palestino se encuentra internado en el hospital Percy -ubicado cerca de la capital francesa- desde el viernes pasado, cuando dejó Cisjordania con agudos dolores estomacales, diarrea y vómitos.
Los médicos de la institución, especializada en desórdenes sanguíneos, han realizado varios análisis en estos días pero nunca han precisado cuál es la enfermedad que sufre el líder palestino, aunque descartaron que se tratara de leucemia.
Sólo se ha revelado que el político de 75 años de edad tiene un conteo bajo de plaquetas, células necesarias para la coagulación de la sangre.
El ministro palestino Saeb Erekat dijo a la prensa que la mujer de Arafat le confesó que la condición médica de su marido es estable pero difícil.
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