La petición a Marulanda la hizo el presidente venezolano en una reunión con los cuatro ex congresistas colombianos entregados este miércoles por ese grupo guerrillero a una misión gubernamental venezolana y de la Cruz Roja, en las selvas de Colombia.
El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, pidió este miércoles al jefe de las FARC, Manuel Marulanda, que mientras siguen «tramitando» la liberación de la ex candidata presidencial Íngrid Betancourt, ordene su traslado a un lugar donde él la tenga cerca.
«Eso es urgente», dijo el gobernante a Pedro Antonio Marín, alias «Manuel Marulanda» o «Tirofijo», al insistir que Betancourt debe ser llevada «a un comando más cercano a ti».
«Es posible que tú no sepas» que las condiciones de su cautiverio son «muy delicadas», agregó y recordó que Betancourt, secuestrada hace seis años por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), es «la única mujer que queda» en poder de esa guerrilla.
La petición a Marulanda la hizo el presidente venezolano en una reunión con los cuatro ex congresistas colombianos entregados este miércoles por ese grupo guerrillero a una misión gubernamental venezolana y de la Cruz Roja, en las selvas de Colombia.
Estas cuatro personas «nos explican», reiteró Chávez, que la situación de Betancourt «es muy difícil», y «a ver cómo buscamos la liberación de Íngrid y ojalá de todos» los rehenes de las FARC.
El gobernante dijo que agradecía «mucho» que el grupo guerrillero del vecino país le haya entregado ya a seis secuestrados, lo que demuestra, subrayó, que «cree en mi», y se comprometió a seguir cumpliendo «nuestra palabra» de gestionar la liberación de todos los cautivos.
«Nadie nos va a separar del camino común que tenemos», agregó e insistió en que ratificaba a Colombia «la más grande voluntad de mi Gobierno y del pueblo venezolano de seguir haciendo todo lo posible hasta liberar a todos».
La ex congresista Gloria Polanco de Lozada, la única mujer liberada este miércoles, le insistió a Chávez en la misma reunión: «Íngrid está muy mal presidente, por favor, usted tiene un corazón grande».
Previamente, el ex congresista colombiano Luis Eladio Pérez, otro de los liberados, aseguró que el grupo guerrillero «se ha ensañado con Íngrid Betancourt» y que «hay que hacer algo» porque «tiene problemas físicos y está muy maltratada por la guerrilla».
El grupo insurgente «se ha ensañado» con la ex candidata presidencial, también de nacionalidad francesa, afirmó al hablar telefónicamente desde Caracas con la emisora colombiana radio Caracol.
Betancourt, secuestrada el 23 de febrero de 2002, tiene un «problema recurrente de hígado» y está «mal física y moralmente», por lo que «hay que pedir, clamar y exigir» su libertad, insistió Pérez.
También reveló en esa y otras declaraciones de prensa que la última vez que vio a la ex candidata presidencial colombiana fue «el pasado 4 de febrero, cuando empezamos la marcha de la libertad», en alusión al día en que comenzó la caminata al lugar donde fueron liberados.
Insistió en que ella «está muy mal», quizá «peor» que en la prueba de supervivencia divulgada en diciembre pasado y en la que, en una fotografía, aparece Betancourt demacrada, muy flaca y con la mirada baja.
«Me parte el alma» la situación de Betancourt manifestó Pérez y remarcó que la mujer «quedó muy, muy mal, muy enferma (…) Quedó totalmente agotada física y moralmente».
Las FARC entregaron este miércoles a los ex congresistas Gloria Polanco de Lozada, Luis Eladio Pérez, Orlando Beltrán y Jorge Eduardo Gechem a una comisión humanitaria que fue a recogerlos hasta las selvas del departamento del Guaviare (sur de Colombia).
EFE
