Al respecto, Amnistía Internacional (AI) advirtió hoy a la Unión Europea de que cualquier incremento de su relación con Israel debe incluir «mecanismos más firmes» sobre los derechos humanos.
Los ministros de Exteriores de la Unión Europea y de Israel celebrarán el próximo lunes un consejo de asociación, en Luxemburgo, en el que se continuará la discusión sobre cómo crear una asociación especial orientada al proceso de paz en Medio Oriente.
Los países de la Unión «todavía están discutiendo sus posiciones», afirmó una fuente comunitaria, mientras que un diplomático europeo afirmó tajantemente que se encontrará una fórmula.
El objetivo es ver hasta dónde se puede hacer que Israel participe en los mecanismos de decisión de la UE según algún tipo de «estatuto híbrido» por el que siga siendo un país no miembro pero fuertemente asociado.
Israel participa con otros Estados del sur y del este en la llamada «Política de Vecindad», diseñada por la UE para ofrecer «todo menos la adhesión» a sus vecinos más próximos.
Fuentes comunitarias señalaron que un ejemplo de ese modelo «híbrido» podría ser la estrecha cooperación que mantiene la UE con países como Noruega, que forma parte del Espacio Económico Europeo, o Suiza, que participa en las políticas de control de fronteras o en el Programa Marco de investigación.
Amnistía Internacional (AI) advirtió hoy a la Unión Europea de que cualquier incremento de su relación con Israel debe incluir «mecanismos más firmes» sobre los derechos humanos.
El director de la oficina de AI para la UE, Nicolas Beger, señaló que una mejora de la relación con Israel sería «una señal errónea» si no incluye mecanismos «que puedan confrontar eficazmente las violaciones de los derechos humanos».
La posibilidad de esta asociación especial se aceleró en abril pasado, cuando la Comisión Europea propuso aumentar la cooperación con Israel, Marruecos, Ucrania y Moldavia, los países que más han aprovechado la «política de vecindad».
EFE
