Señor Director:
La emergencia sanitaria por Covid-19 que nos afecta a nivel mundial, ha traído consigo otra epidemia: la desinformación. Reconocida por la OMS como infodemia, esta es la sobreabundancia de información falsa, que se caracteriza por su rápida propagación entre las personas y medios, especialmente a través de redes sociales.
En el contexto de salud que vivimos, las personas buscan respuestas a las interrogantes que surgen, por lo que la proliferación de noticias falsas se vuelve más fácil y adquiere más velocidad, lo que puede generar confusión e incluso dificultad para llegar a información verídica.
Por esta razón, en la actualidad resulta fundamental entregar a la ciudadanía formación en alfabetización informacional, digital y mediática. Resulta fundamental instaurar programas que permitan a las personas desarrollar competencias en el uso de información incluyendo el evaluar críticamente la información que a diario se consume.
En estas circunstancias, donde las noticias falsas y la desinformación se expanden con rapidez, la habilidad de desarrollar un juicio crítico frente a la información es relevante, por lo que debería ser materia de interés para gobiernos e instituciones de educación, considerando la importancia de contar con una ciudadanía informada responsablemente, capaz de discernir, dentro del gran mar de información que nos inunda, cuál es aquella verídica, útil y confiable.
Cherie Flores Fernández
Académica
Departamento Gestión de la Información
Universidad Tecnológica Metropolitana
