Señor Director:
Como proponentes del proyecto Río Submarino Sur-Norte Chile (Aquatacama), no podemos estar de acuerdo con la Carta publicada por Pablo García-Chevesich que, específicamente en el punto cinco indica que, “la controversial carretera hídrica no es viable desde el punto de vista ecológico y tampoco soluciona el problema de fondo, pues es un proyecto de riego, y esos volúmenes pueden obtenerse del mar en forma local a través de la desalación sustentable”.
En esta afirmación el autor solamente expresa opiniones, sin ningún fundamento científico. Asimismo, me parece que está metiendo en un mismo saco tanto el proyecto terrestre de la Corporación Reguemos Chile como nuestro proyecto submarino que es radicalmente distinto.
El Río Submarino utiliza el concepto de disponibilidad de agua en la desembocadura de un río: diferencia (A-B) entre (A) caudal físico real y (B) caudal ecológico requerido río abajo, concepto del cual el Estudio Corfo/UCh de junio del 2019, da una primera aproximación de 1000 m3/s desde Valparaíso hasta Puerto Montt, principalmente en cuatro ríos: Maule, Biobío, Imperial y Toltén. Considerando la probable disminución del caudal de dichos ríos sureños debido al Cambio Climático, dicha disponibilidad seguiría siendo muy superior a la demanda nortina para todos los usos: humanos, industriales y agrícolas.
Nos remitimos a dos estudios del Profesor de la Universidad de Chile, Fernando Santibáñez, que llegan a conclusiones radicalmente opuestas a lo expresado por Pablo García-Chevesich. Estos afirman que la desalación: no es sustentable, confirmando lo que numerosos otros estudios científicos llevan diciendo desde decenios; y no es asequible para la agricultura tanto por volúmenes como por precio. La desalación tampoco puede solucionar el problema agrícola chileno. Aunque pudiera aceptar sus externalidades negativas para satisfacer las demandas humanes y/o mineras, como ya se realiza.
Si integramos en el rubro agrícola el lucro cesante de Chile que no utiliza de lleno su pleno potencial, ninguna otra solución alternativa puede tampoco solucionar este problema, como podría ser la eficiencia del riego, el reutilización de aguas servidas, o tantos otros que sólo representan una pequeña fracción de las necesidades hídricas que requiere el crecimiento del país para alcanzar su pleno potencial de desarrollo, en todos sus sectores (urbano, industrial/minero, y particularmente agrícola). Sin embargo, sí pueden estas otras soluciones constituir un paliativo que debiera aplicarse de todas las maneras.
Nuestro proyecto ofrece una conectividad integral de todos sus recursos hídricos de norte a sur; no sólo para la agricultura existente sino que también y, sobre todo, para su expansión en hectáreas suplementarias, tal cual lo permiten los capitales agronómicos, meteorológicos, humanos y organizacionales existentes desde Arica a Valparaíso (Estudio CNR/U. de Chile, septiembre del 2013); además de contribuir al bienestar de cerca del 80 % de la población chilena y al impulso del desarrollo económico de sus comunidades locales.
Félix Bogliolo
Fundador y CEO de Via Marina