El documento de seis páginas, preparado por el senador Alberto Espina, fue presentado ayer a los diputados del partido, a quienes se les explicó las razones por las que deben mantenerse en la senda de los acuerdos con la Concertación para modificar el sistema binominal.
Aunque en la reunión de anoche -entre los senadores Alberto Espina y Antonio Horvath y los diputados de Renovación Nacional- los parlamentarios no lograron alinear a sus diputados en torno a una de las dos fórmulas de modificación al sistema binominal que la comisión política ampliada aprobó para que fueran presentadas al gobierno, a Espina se le ve optimista de los resultados que generará en los legisladores el documento, el cual contiene un análisis detallado y frío del porqué se debe negociar, ahora, con el oficialismo.
El negociador está convencido que con el análisis que le presentaron a la bancada del partido -y al que El Mostrador.cl tuvo acceso-, en la que fundamentan las razones de la colectividad para proponer una modificación al actual sistema electoral, se logrará ordenar a los legisladores, ya sea en torno al aumento de un senador en cada una de las siete circunscripciones más grandes del país -mecanismo trinominal- o a la de los diez senadores nacionales.
Sin embargo, ya se sabe que el respaldo a cualquiera de los dos mecanismos no será unánime, pues como es sabido el diputado y ex presidente del partido Alberto Cardemil se niega de plano a introducir modificaciones al sistema binominal, en lo que es secundado por su compañero de bancada Nicolás Monckeberg.
Ante tan férrea defensa que algunos parlamentarios de RN hacen del sistema electoral chileno, han surgido otros, como el senador Antonio Horvath que incluso estarían dispuestos a transformar el sistema binominal en trinominal en las 19 circunscripciones del país, cosa que es prácticamente imposible que sea aceptada por una mayoría de los legisladores de la colectividad, pero que no es vista con malos ojos por algunos de ellos.
Sin reformas, vitalicios dan mayoría a la Concertación
En el encuentro, Espina intentó terminar de lleno con uno de los argumentos más usados por la UDI en contra de cualquier modificación, que asegura que el Senado puede trabajar con 38 integrantes y con la Cámara Alta empatada igual se puede llegar a acuerdos.
En el documento se destaca que en ningún caso el Senado estará empatado, ya que "es un hecho que luego de la votación, en las próximas semanas, de la Reforma Constitucional en la Sala del Senado, este último quedará integrado por 40 miembros: 19 circunscripciones binominales más dos Senadores Vitalicios. En consecuencia, y dado que en el mejor de los casos se empatará en todas las circunscripciones, la Alianza tendrá 19 senadores y la Concertación, sumado Avila, 19 senadores. Como se mantendrá la norma de los vitalicios, en definitiva el Senado quedará con un total de 40 senadores".
A ello el texto suma que debido a la manera como se realizará la votación de las reformas constitucionales, no se podría impedir mantener a los vitalicios. Porque, primero se vota la eliminación de los designados, lo que se debería aprobar con los votos de la derecha y la Concertación, y, posteriormente, la eliminación de los vitalicios. Lo que haría cambiar el panorama, porque según el análisis de Espina, la Concertación votará en contra y la derecha a favor.
La argumentación del oficialismo para su votación, explica el documento, será la existencia de una indicación posterior a través de la cual: "pide sustituir los vitalicios por Senadores Presidenciales de ocho años a contar del 2005, esto es, Frei y Lagos duran hasta el 2013".
El análisis continúa precisando que "como el quórum para aprobar esta eliminación es de 3/5, esto es 29 senadores, se rechazará la eliminación de los vitalicios, ya que la alianza más los designados del sector, no cuenta con los votos suficientes".
Posteriormente, debería votarse la indicación de la Concertación para sustituir los senadores vitalicios por presidenciales, y el pacto oficialista "votará a favor. Si la alianza también vota a favor, quedarán como senadores presidenciales, hasta el año 2013, Lagos y Frei. Si la alianza vota en contra, se rechazará esta indicación y su efecto es que los vitalicios se mantendrán vigentes".
En consideración a ello y a otro importante número de argumentaciones, en este aspecto, el documento concluye que "es evidente que el mejor momento para negociar es ahora. Hacerlo después significa que la Concertación lo hará con la carta de tener aprobada una mayoría en el Senado, por los próximos dos gobiernos. Su posición de fuerza será mayor y, por lo tanto, la alianza quedará en una situación de mayor debilidad.
El texto de seis páginas entrega justificaciones para respaldar cualquiera de las dos fórmulas que RN presentó al gobierno, aunque se dice que lo más probable ahora es que los parlamentarios opten por la de los senadores nacionales. Y, aunque Espina admite que aún falta para que los diputados se definan, está optimista de que el exhaustivo documento que les presentaron los ayudará a tomar una decisión lo antes posible.
Ver documento completo:
Fundamentación de la propuesta de RN
