Publicidad

FECH pide al Gobierno cortar ‘subsidios’ estatales a universidades privadas

Presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile, Giorgo Boccardo, plantea que la morosidad en el pago de mensualidades en la Casa de Bello se origina porque beneficios estatales se acotan a los aranceles de referencia y no a los reales. Por ello, cree que el Gobierno debe terminar con los »subsidios» que se entregan a los planteles privados.


El presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile, Giorgo Boccardo, afirmó que el Estado debe terminar con la entrega de recursos estatales a las universidades privadas con el fin de subsanar los problemas de financiamiento que aquejan a los planteles de educación superior públicos.



En conversación con El Mostrador.cl, el dirigente señaló que la Casa de Bello está buscando una solución para los más de ocho mil estudiantes morosos que existen en la actualidad, muchos de los cuales se encuentran en esta situación porque los aportes del gobierno se circunscriben a los aranceles de referencia que fija el Consejo de Rectores, que es muy distinto al real que cobran las universidades finalmente.



"Ese diferencial que se produce hace que prácticamente el estudiante tenga que pagar otro arancel, que a final de cuentas no va a pagar. Por eso, para nosotros el modelo ideal es igualar ambos aranceles", plantea.



Problema de temporalidad


Giorgo Boccardo

Sin embargo, según Boccardo, la dificultad para resolver el tema radica en un problema de "temporalidad": los universitarios protestan por la situación en mayo; el gobierno resuelve el presupuesto en septiembre; y los rectores fijan los precios en diciembre. Por esa razón, dice, urge constituir una mesa tripartita a mediados de año para poner punto final a este conflicto.



«No puede ser que todos los años, en esta fecha, estemos frente al mismo conflicto, o sea, esta es una cuestión histórica, y nadie lo ha abordado, porque en definitiva el origen del financiamiento de una universidad le da su carácter. Si todavía al gobierno le interesa tener universidades estatales al servicio del país, tiene que ser él quien las financie, porque si empiezan a ser los estudiantes los que cumplan con esa función, entonces, estas instituciones dejan de ser estatales», afirmó.



Al respecto, recordó que en la Universidad de Chile casi el 40% de su financiamiento tiene como pilar los aranceles estudiantiles



"Hoy día cerca de un 40% de su financiamiento proviene de aranceles estudiantiles y sistemáticamente en el tiempo el Estado ha ido desligándose y reduciendo cada vez más la asignación de recursos a la Universidad de Chile y en general a las universidades estatales, y a partir de eso se entra en una lógica que ha sido bastante perniciosa en que la manera en que las universidades y particularmente la nuestra ha encontrado de resolver su conflicto es a través del alza de aranceles en el tiempo", comentó.



Con todo, explicó que afortunadamente han logrado acuerdos con las rectoría en cuanto a solucionar el problema de los morosos, no cobrándoles a éstos intereses sobre las deudas, que pueden llegar hasta el 14%, y realizando en marzo un catastro para desnudar la realidad socioeconómica de los alumnos con dificultades.



Cortar «subsidios»



No obstante, recalca que el acuerdo al interior de la Universidad de Chile en ningún caso soluciona el problema de fondo, sobre el cual se debe pronunciar la actual administración de Michelle Bachelet.



«Necesitamos un pronunciamiento y una señal potente del gobierno en esta materia, porque eso da cuenta de cuál es la intencionalidad o lo que quiere para sus universidades: o va a seguir subvencionando a las universidades privadas de este país, que es lo que hace hoy día; o con los dineros de todos los chilenos va financiar universidades que entregan servicios al país», explicó, aclarando que las entidades privadas son subsidiadas mediante el Mecesup, el Aporte Fiscal Indirecto (AFI), entre otros aportes.



"Nadie espera que el médico de la Universidad de Los Andes vaya a trabajar en el sector público y nadie espera que no te pidan cheque en garantía, pero sí del profesional de la Universidad de Chile se espera una forma de entregar un servicio distinto. Aquí el gobierno tiene que tomar una decisión y creo que tiene poca voluntad de avanzar en eso", enfatizó.



El dirigente también incluyó en esta categoría a la Universidad Católica, que si bien es parte de las instituciones tradicionales que conforman el Consejo de Rectores, "es privada por representar el proyecto de la iglesia (Católica)".



Sintonía con el rector



-¿Cómo está la sintonía con el rector en cuanto a defender el rol de la educación pública?

-Si bien ha tenido un discurso favorable a lo que nosotros planteamos, que es un nuevo trato de la Universidad de Chile con el Estado, ha dado políticas dubitativas, o sea, por una parte asume este discurso, instala algunos proyectos, instala nuevas relaciones, pero por otra, vemos una política de reingeniería de los funcionarios, alzas de aranceles, además, hubo que movilizarse bastante para que no se cobrarán intereses a los morosos. En consecuencia, creo que le falta fuerza a esta rectoría para instalar este discurso.



En la rectoría veo dos proyectos de universidad: el modelo de educación pública, de una universidad nacional, estatal, que es el discurso del rector, pero con señales de una universidad que se moderniza, para ponerse al mismo nivel que el resto de las universidades privadas. Eso me preocupa bastante porque no es el rol de la universidad y creo que si se sigue con esa posición, se va a entrar en un conflicto no sólo con nosotros sino que también con los académicos y funcionarios.



___________


Publicidad

Tendencias