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Joaquín Lavín ingresa al ilustre círculo de los no candidatos

Si algo ha quedado claro en materia electoral es que basta con descartar aspiraciones de llegar a La Moneda para convertirse en aspirante. Cuando el aludido comienza a tener una relevancia pública significativa, pasa a transformarse en lo que niega ser. Ése es el caso del ex alcalde de Santiago.


En medio del debate presidencial que algunos sectores de la Concertación y la Alianza por Chile intentan evitar, cada vez se suman nuevos nombres a la exclusiva lista de los «no candidatos», a la que desde este se agrega el ex abanderado gremialista, Joaquín Lavín.



La lista de estas ilustres figuras aumenta cada día y a ella pertenecen todos aquellos que algunos grupos dentro de sus respectivos partidos intentan levantar con miras a los comicios presidenciales de 2009, pero que aseguran no estar disponibles para correr en esta carrera, caso en el que se encuentran -entre otros- el timonel de la UDI, Hernán Larraín; el secretario general de la OEA, José Miguel Insulza; el senador Pablo Longueira y, cómo no, el ex Presidente Ricardo Lagos.



El otrora alcalde de Santiago se reunió en un conocido café de Vitacura con un grupo de siete diputados de la UDI, oportunidad en que -según señalaron- hablaron de la labor que cumple actualmente el ex edil en la comisión sobre equidad, a la que el Gobierno lo invitó a participar, y de cómo los legisladores presentes lo apoyarán en esta labor.



De hecho, varios de ellos se manifestaron sorprendidos de que una reunión de «amigos» resultara tan interesante para la prensa y se esforzaron sospechosamente en hacer entender a quienes llegaron hasta el mencionado local que el tema presidencial nunca estuvo sobre la mesa. Además, que los asistentes a la cita -Iván Moreira, Javier Hernández, Alejandro García-Huidobro, Ramón Barros, Juan Lobos, Sergio Bobadilla y Gastón von Mühlenbrock- sólo tenían por objetivo manifestarle a Lavín su disposición a colaborar con él en el trabajo que está realizando en la instancia.



Todo ello no le quita a este gesto la interpretación que todos los participantes en el encuentro querían evitar, por múltiples razones. Las que ellos esgrimen, incluido el propio Lavín, es que el partido ya fijó su itinerario para nombrar a su abanderado presidencial -abril de 2009- y ahora corresponde respetarlo.



Así y todo, resulta una obviedad que en el marco de la inquietud reinante en el partido, debido a la falta de candidato, este grupo de diputados -concientemente o no- haya incluido a Lavín en la lista de las figuras que la tienda podría potenciar de aquí a los comicios.



Después de todo, el también ex jefe comunal de Las Condes tiene la tarea prácticamente hecha y, tal como están las cosas, es el único que llagada la hora de la verdad podría enfrentar a un Sebastián Piñera que toma cada día más fuerza.



De hecho, aunque el ex abanderado de la UDI y de la Alianza -en dos oportunidades- fue consultado acerca de si seguía pensando que debe cuidarse el liderazgo de Piñera, como afirmó hace un par de meses, no fue tan explícito como en esa oportunidad.



Esta vez, un tanto evasivo, manifestó que «lo que la gente no quiere son las peleas, lo que la gente quiere es la unidad. Yo estoy seguro de que en eso interpreto ciento por ciento a todos. Entonces, hay que cuidar los liderazgos y más adelante se verá… Que sea lo que Dios quiera».



En su opinión, «es muy malo» hablar de candidaturas presidenciales ahora. «Quedan dos años y medio de un gobierno y hay que aprovecharlos», por lo que le pidió a los diputados que apoyen en el Congreso los proyectos que surjan de la comisión de equidad, muchos de los cuales «van a ser también mis propias ideas», porque lo que surja de esta comisión tiene que ser apoyado por todos, dijo.



Tal como se dieron las cosas, las declaraciones post cafecito estuvieron plagadas de señales, porque tal como la mandataria le hizo un guiño invitándolo a participar en la instancia asesora, éste le respondió expresando su compromiso con la tarea que le encomendó.



«El tema presidencial hoy día, la verdad, no es tema. En mi caso personal, durante años busqué ser Presidente, es la verdad. Pero ya no lo busco, estoy en otra etapa. Mi etapa hoy día es colaborar más allá incluso de la política, siento un compromiso con la Presidenta Bachelet por haberme nominado en esta comisión y quiero dedicarme ciento por ciento a esto».



Pero la señal que puede ser preocupante para las aspiraciones del abanderado de RN fue es la que dio Lavín en orden a evitar embarcarse derechamente a apoyar la candidatura del empresario. Consultado al respecto, el gremialista se limitó a precisar que «me alegro de que la directiva de la UDI haya tomado una decisión, va a haber un candidato en abril de 2009 y yo me quiero atener a eso. Falta mucho todavía».



Por su parte, el diputado Moreira insistió en que «lo único que hemos hablado con Joaquín, en una reunión de amigos, es que él es un actor político con mucho que aportar. Pretendemos que fortalezca su liderazgo en la lucha contra la pobreza y la droga, porque en las últimas elecciones presidenciales siempre demostró ser un hombre comprometido con la clase popular. Creo que ése es un capital enorme que tiene».



Y si bien en la UDI no hubo mayores comentarios en relación a la cita con los diputados, saltó más de una carcajada irónica cuando se enteraron de que el encuentro fue definido como «una reunión de amigos».



Sin embargo, reconocieron que Lavín continúa siendo una carta para el partido. De hecho, un parlamentario asegura que visto el actual escenario, «Joaquín es definitivamente la mejor opción para la UDI», no obstante estimar que de aquí a 2009 «nadie sabe lo que puede pasar» y que «siendo objetivos» las decisiones que debe tomar la tienda en materia presidencial están irremisiblemente atadas a las que adopte la Concertación.



A eso se debe, en parte, que el partido haya optado por retardar sus definiciones, porque se evalúan disímiles escenarios que podrían influir en quién es el candidato más adecuado para la UDI, cuán mal termina el actual gobierno, si la carta de la Concertación es Soledad Alvear, si el oficialismo opta o se ve obligado a ir con más de un candidato a la primera vuelta, entre otras variables.



La UDI monitorea cada movimiento del conglomerado oficialista y le toma el pulso permanentemente al ambiente nacional, porque eso definirá a su presidenciable, sin descartar qué tan desgastado estará, a la altura de abril de 2009, Sebastián Piñera.


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