“Aquí estamos hablando de generales del Ejército, y todos sabemos que obviamente que quien envió la orden fue Pinochet Ugarte, pero evidentemente no se puede hacer un juicio a alguien que ya falleció”, sostuvo la senadora.
La sala penal de la Corte Suprema entregó este jueves el fallo final por el doble asesinato del ex general Carlos Prats y su esposa Sofía Cuthbert, rebajando las condenas de cárcel contra la cúpula de la DINA. En el caso del delito de doble homicidio calificado, Manuel Contreras y Pedro Espinoza cumplirán una sentencia de 17 años.
“Este fallo es histórico, más aún que la justicia chilena haya reconocido que fue una asociación ilícita la que se constituyó para asesinar al general Prats y su señora en Argentina. Fuera de ser un crimen alevoso, lo más dramático es que fue hecho por sus propios pares”, sostuvo la parlamentaria.
Agregando que “aquí estamos hablando de generales del Ejército, y todos sabemos que obviamente que quien envió la orden fue Pinochet Ugarte, pero evidentemente no se puede hacer un juicio a alguien que ya falleció”.
Lo importante dijo es que “queda claro para la historia que acá hubo una asociación ilícita para asesinar al general Prats porque según la DINA constituía el principal enemigo de la dictadura. Aquí hubo altísimos militares involucrados y es una lección que el Ejército ha incorporado y debe incorporar de por vida. Por fin se hizo justicia”.
Valoró el gran esfuerzo hecho por la abogada Pamela Pereira y la tenacidad de sus hijas que por más de 30 años han buscado la ansiada justicia.” Les envío un abrazo solidario para todas ellas”, precisó.
En todo caso, señaló la senadora, quedan interrogantes que son necesarias conversarlas a su debido tiempo y que dicen relación con la necesidad que el Ejército procese esta situación y el hecho que al interior de sus propias filas, al más alto nivel se constituyó una asociación ilícita para asesinar de manera brutal a quien fuera nada menos que su comandante en jefe
“Esto debe ser procesado por el Ejército y a mi juicio debería tener ciertas consecuencias. Yo no me imagino por ejemplo que estos generales condenados e involucrados aunque sean ex generales puedan seguir guardando ese título, creo que hay que buscar una modalidad en la que no solo sean degradados como militares si no que tampoco puedan usar ese título porque no lo merecen”, concluyó Isabel Allende.
