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“Si el fallo no respeta los tratados vigentes, es arbitrario y salomónico, me parece que los chilenos tienen algo que decir” Jorge Tarud y su idea de plebiscitar decisión de La Haya:

“Si el fallo no respeta los tratados vigentes, es arbitrario y salomónico, me parece que los chilenos tienen algo que decir”

Bastián Fernández
Por : Bastián Fernández Periodista de El Mostrador
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Su idea incendió Twitter y algunos la tildaron derechamente como un llamado a no acatar la decisión de la Corte Internacional. En esta entrevista, el diputado despliega su tesis, y aunque apunta contra la política de cuerdas separadas –promovida por Perú y adoptada por Chile– y contra el litigio que presentó Bolivia, se cuida de criticar directamente al canciller Alfredo Moreno.


Fue una de las noticias que marcó el sábado. El diputado Jorge Tarud (PPD), miembro de la comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara Baja, propuso realizar un plebiscito si el fallo de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya –que se dará a conocer el 27 de enero– no cumple con los tratados.

Tarud ha estado siempre vinculado a temas internacionales, tanto por la Cámara como por su carrera diplomática, que incluye Arabia Saudita, Australia y China. Además, su hijo Jean Paul es embajador en Emiratos Árabes Unidos. Esto ha despertado una serie de sospechas en el mundo de la diplomacia, debido a que se mantuvo durante el gobierno de Sebastián Piñera, algo poco habitual en los denominados “embajadores políticos”.

El plebiscito propuesto por Tarud no demoró en encender el debate en las redes sociales, donde criticaron al diputado por su nacionalismo y demagogia. “Tiene un gran porcentaje de gente que dispara de forma arbitraria. Hay gente seria y otra que no”, se defiende Tarud, restándole importancia a las críticas en Twitter, donde fue uno de los temas más comentados de ayer.

De paso, profundiza en su idea sobre el plebiscito, critica la política de cuerdas separadas que implementó esta administración, pero no apunta directamente al ministro Alfredo Moreno. “Sería injusto que yo dijera que el canciller Moreno tiene toda la responsabilidad”, dice Tarud.

-Usted propuso un plebiscito, ¿podría contar un poco más sobre su idea?
-En caso de que la Corte de La Haya llegue a dar un fallo que no respete los tratados vigentes –del 52 y 54– y que no actúe argumentando en derecho, sino que lleve a cabo una sentencia de rango salomónico, habría que consultarles a los chilenos y chilenas. Es decir, esto atropellaría los intereses de Chile, porque estarían repartiendo a su arbitrio territorio chileno. Acatar un fallo en esas condiciones, a mi juicio gravísimas, no sólo para Chile sino para toda la comunidad internacional, porque sería que no se respetarían los tratados, yo creo que es una decisión que hay que consultarles a los chilenos y chilenas.

-¿Cómo se podría llevar a cabo este plebiscito?
-Si hay acuerdo de un plebiscito, el Gobierno envía un proyecto con discusión inmediata y se puede aprobar en la Cámara y Senado, y en forma transitoria en la discusión.

-¿Usted está sólo en esta idea o la ha consensuado con alguien más?
-No, no es una iniciativa que haya consensuado. Yo estimo que hay un exceso de triunfalismo del Perú. Me pregunto si ellos están dateados sobre cómo viene el fallo. Y en consecuencia yo estimo que es un momento histórico el que estamos viviendo.

-Pero no acatar el fallo sería a costa de la confianza y legitimidad internacional del país, ¿o no?
-Nicaragua demandó ante la Corte a Estados Unidos y éste no lo realizó.

-¿No acatar también puede sentar un antecedente para el litigio que ha iniciado Bolivia contra de Chile?
-Es que ese es un verdadero invento. Acá se trata de establecer un nuevo principio que serían los derechos expectaticios. Es decir, si tú tenías en venta tu casa, yo te hice una oferta, tú me dices que no, pides una oferta mayor y yo no quise subir la oferta y no se llegó a acuerdo. Pero entonces yo te reclamo que tú me ofreciste tu casa y, por lo tanto, tienes que negociar conmigo y venderme la casa. Eso es lo que pide Bolivia.

[cita]»Esto atropellaría los intereses de Chile, porque estarían repartiendo a su arbitrio territorio chileno. Acatar un fallo en esas condiciones, a mi juicio gravísimas, no sólo para Chile si no para toda la comunidad internacional, porque sería que no se respetarían los tratados, yo creo que es una decisión que hay que consultarles a los chilenos y chilenas», afirma Tarud.[/cita]

-La postura oficial del Gobierno es que, independientemente del resultado, Chile va a acatar el fallo
-Bueno… pero yo pregunto, ¿acaso le tienen miedo a lo que decida la gente? ¿Acaso la gente no es inteligente y no capta lo que está pasando? ¿Por qué no preguntar a la ciudadanía?

-Tal vez porque existe una cierta política de Estado respecto de este caso, de acatar el fallo…
-¿Pero por qué no preguntar al ciudadano? El ciudadano tiene derechos, Chile nos pertenece a todos. En consecuencia, habría que consultar.

-Hay otros temas que suscitan mayor interés nacional y sobre los que también se ha propuesto hacer un plebiscito. Uno de estos es el cambio de Constitución, que según la última encuesta CEP es respaldado por un 44% de la población.
-Yo esta idea la tengo hace tiempo. Hace más de dos años presenté un proyecto de reforma constitucional para establecer el plebiscito en la Constitución y en forma libre; es decir, dándole la potestad al Presidente de la República para que en temas de relevancia para el país se convoque a un plebiscito para que se pronuncien los ciudadanos. Para mí no es una idea nueva, yo creo que en temas como la Constitución, u otros que se juzgue pertinentes, la gente tiene que participar. Me extraña que haya sectores de la política que se opusiesen a consultar a la ciudadanía.

CANCILLERÍA DE CUERDAS SEPARADAS

-La Cancillería asimiló la teoría de “cuerdas separadas” propuesta por el Perú, que consiste en que la relación comercial de los dos países no se debe mezclar con el plano político…
-Siempre me opuse a la tesis que planteaba el Perú. No fui partidario de las cuerdas separadas, porque este es un tema sumamente importante y, en consecuencia, no podía haber una división entre lo político y lo económico. En términos políticos había que tomar una actitud más distante con las autoridades peruanas.

-Sobre la base de ese antecedente, ¿cómo evalúa la gestión del canciller Alfredo Moreno?
-Creo que nos dio una buena sorpresa. Cuando fue designado no lo conocíamos y no es un hombre que provenga del mundo de las relaciones internacionales. Nos dio una buena sorpresa porque ha sido un buen canciller.

-¿Pese a que haya adoptado la teoría de las cuerdas separadas?
-Yo no sé quién decidió aceptar la teoría de las cuerdas separadas. Moreno es un buen negociador, por lo tanto, puede que ahí haya dicho veamos cómo ponemos esto en otro carril. De Moreno tengo la mejor opinión, pero a mí nunca me gustó la política de cuerdas separadas.

-Chile ha perdido aliados históricos como Ecuador y Brasil. Alejamientos que se deben, en parte, a que el gobierno ha priorizado la Alianza del Pacífico…
-Con Ecuador no es culpa del gobierno, porque el gobierno ha hecho muchos esfuerzos, incluso el Presidente visitó a Rafael Correa cuando estuvo en serios problemas por el quiebre de la democracia. Chile y el gobierno han hecho esfuerzos. Con Brasil la situación es diferente, porque no les gusta que nosotros hagamos tratados o acuerdos internacionales donde ellos no estén. Entonces, desde el principio, cuando nosotros acordamos con EE.UU. el TLC, a ellos no les gustó. A él le ha gustado siempre representar a todo el Cono Sur, y no les gustó que Chile se fuera por el lado y tuviera el acuerdo con EE.UU.

-Si el fallo de La Haya es adverso para Chile, ¿cree que hay una responsabilidad política de esta administración, particularmente de Alfredo Moreno?
-No. Creo que, si hay un fallo adverso, la responsabilidad política va a ser compartida por todos los que participaron. Sería injusto que yo dijera que el canciller Moreno tiene toda la responsabilidad. Acá hay un equipo jurídico, un equipo político, dos gobiernos que han enfrentado el asunto, por lo tanto, sería una injusticia.

Yo estoy muy consciente de la historia que vivimos en estos momentos y no quiero que las próximas generaciones nos recriminen que no actuamos a la altura de lo que estábamos viviendo.

-Y actuar a la altura, según su visión, pasa por realizar el plebiscito…
-Si el fallo no respeta los tratados vigentes, es arbitrario y salomónico, me parece que los chilenos tienen algo que decir.

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