Según el militante del PPD e ingeniero comercial de la Universidad del Bío-Bío, su nombramiento tiene que ver con su trayectoria.
Rodrigo Peñailillo fue nombrado ministro del Interior y Seguridad Pública del gabinete de la presidenta electa Michelle Bachelet. En entrevista con la revista Que Pasa, el militante PPD e ingeniero comercial de la Universidad del Bío-Bío, se definió de la siguiente manera: «Soy una persona con alto compromiso de servicio público, que ha destinado gran parte de su vida a ello. Tengo una alta capacidad de gestión, un proceso de toma de decisiones rápido, le doy un valor a la palabra y al compromiso muy alto y también tengo la capacidad de escuchar. Nunca me pierdo, uno trabaja para las personas».
Su influencia en el círculo íntimo de la futura mandataria es evidente: diseñó el desembarco de Bachelet desde Nueva York en marzo pasado. Luego se desempeñó como secretario ejecutivo de la campaña presidencial y asumió la interlocución con los presidentes de los partidos políticos. Además, fue jefe de gabinete de la presidenta durante su primer período.
«Voy a cumplir las tareas como corresponde en el Ministerio del Interior, eso también significa que tendré un rol de comunicar al país las decisiones que se tomen. Eso lo vamos a hacer a cabalidad. Estaré presente en los medios de comunicación cada vez que se necesite que el ministro del Interior dé su opinión», declara.
Consultado por la derrota en 2010 ante Sebastián Piñera, asegura que los cambios en el país fueron más rápido que la capacidad de adaptación de la Concertación. En cambio, la Nueva Mayoría, aclara, «está permeada por esta nueva sociedad que requiere mayor igualdad”.
De igual modo, responde respecto de la poca experiencia política que tiene para ejercer como ministro del Interior: «Efectivamente, se necesita la experiencia política para todas las labores, pero tan importante como eso es estar conectado con lo que pasa en Chile. Estar conectado con este nuevo ciclo político-social. Nosotros hemos dicho que éste no es el quinto gobierno de la Concertación, es el primer gobierno de la Nueva Mayoría. Entender eso es tan relevante como lo otro. Por lo tanto, hoy no basta sólo la experiencia política. No es sólo un tema de capacidades, sino que también de convicción del compromiso asumido. Entendemos que hay un nuevo ciclo político, con nuevos desafíos, donde no sólo es importante el crecimiento económico, sino que también es necesario combatir la desigualdad para alcanzar el desarrollo como un país inclusivo».
Se le consulta sobre un trascendido respecto a que delegará las materias de seguridad en la Subsecretaría de Prevención del Delito. «No puedo desligar mi responsabilidad directa como ministro del Interior y Seguridad Pública. No se puede delegar. Pero mi responsabilidad global, el sello de mi gestión será el cumplimiento total del programa de gobierno en todas sus dimensiones. En eso es lo que voy a trabajar», responde.
«Suena como un primer ministro», lo interpela el periodista de Que Pasa. Entonces, Peñailillo contesta: «Suena como el rol que un ministro del Interior tiene que tener».
