La marcha llegó hasta el palacio de la Moneda, donde los organizadores entregaron una carta con sus demandas dirigida a la presidenta Michelle Bachelet, que actualmente cumple una gira por Sudáfrica, Mozambique y Angola.
Unas quince mil personas, según los organizadores, se manifestaron hoy en Santiago para solidarizar con la población palestina de Gaza, sometida desde el pasado 8 de julio a ataques israelíes y para demandar al gobierno que rompa relaciones con el Estado de Israel.
«Chile no puede ser cómplice de un Estado genocida», dijo a los periodistas Tarik Lama, dirigente de los palestinos residentes en Chile, concepto contenido también en las pancartas y consignas de los participantes en la actividad, la tercera de similares características que se realiza en Chile desde el inicio de los ataques sobre Gaza.
En Chile vive la comunidad palestina más numerosa fuera del Oriente Medio, de unas 400.000 personas, resultado de una inmigración iniciada en la segunda década del siglo XX y compuesta casi exclusivamente por cristianos.
Los manifestantes, convocados por la comunidad palestina residente, organizaciones de derechos humanos y federaciones de estudiantes marchan por la Alameda Bernardo O’Higgins, la principal avenida de la capital chilena, también para exigir un alto al fuego inmediato en la Franja de Gaza.
El gobierno de Chile convocó la semana a consultas a su embajador en Tel Aviv y ha emitido varios pronunciamientos pidiendo el fin de los ataques «desproporcionados» del Ejército israelí contra la población civil de Gaza, aunque también ha condenado el lanzamiento de cohetes contra el territorio israelí por parte del grupo Hamas.
La marcha llegó hasta el palacio de la Moneda, donde los organizadores entregaron una carta con sus demandas dirigida a la presidenta Michelle Bachelet, que actualmente cumple una gira por Sudáfrica, Mozambique y Angola.
Según datos difundidos en las últimas horas por Naciones Unidas, desde el pasado 8 de julio el conflicto ha causado la muerte de 1.898 palestinos, en su mayoría civiles, incluidos 447 niños y de 67 israelíes, en su mayoría soldados.
Fuentes policiales dijeron que la marcha en Santiago se desarrolló de forma pacífica, aunque ha originado esporádicos cortes o desvíos del tráfico de vehículos.
Parlamentarios, dirigentes estudiantiles, aristas y figuras de la televisión participaron en la manifestación.
