«Es un buen progreso, los chilenos no quieren revolución. Buscan seguir a esta tierra prometida donde el Estado los proteja, tengan acceso a los mercados y que no haya abusos dentro él”, sostuvo en el programa ‘Hasta Agotar Stock’ de El Mostrador.TV.
“Todos los que han comenzado sus mandatos quieren cambiar lo que se estaba haciendo antes”, comentó el analista político Patricio Navia en el programa ‘Hasta Agotar Stock’ de El Mostrador.TV, donde analizó la impronta refundacional que ha caracterizado el primer año de gobierno de Michelle Bachelet.
Sin embargo, dijo que es un síntoma normal del inicio de todo gobierno y que si bien habrá transformaciones, éstas no serán de gran magnitud.
Sobre lo anterior, se explayó: “La política es como las comedias románticas, siempre sabemos cómo van a terminar, pero nos gusta verlas”.
-¿Cómo va a ser el final de esta comedia romántica entonces?
-Bachelet va a hacer algunas transformaciones. Mucho menos radicales de lo que prometió. No van a ser reformas, van a ser reformitas. El gobierno de Bachelet va a buscar coordinar las reformas y consensuarlas con los sectores más moderados de la coalición. Hay sectores de la izquierda que quieren avanzar más a la izquierda y hay sectores intermedios que frenan ese avance.
Para el académico, desde el gobierno de Lagos la izquierda empuja transformaciones contenidas y graduales. “Hay sectores de la derecha que acusan que esto se transformará en Venezuela, pero (aun así) esto significa que el tamaño del Estado va a seguir estando más a la derecha que EE.UU.”, explicó.
Las “reformitas”, como las catalogó Navia, son un avance gradual a posiciones más de izquierda. “Es un buen progreso, los chilenos no quieren revolución. Buscan seguir a esta tierra prometida donde el Estado los proteja, tengan acceso a los mercados y que no haya abusos dentro él”, profundizó.
Por otra parte, el analista político señaló la importancia del gobierno de Sebastián Piñera. “Lo que hizo él fue hacerle un favor a la izquierda. Se atrevió a hacer cosas que La Concertación nunca pensó. Los seis meses de postnatal y el 7% de los jubilados, eran proyectos que partieron con la Concertación”, argumentó.
“En Chile avanzan las cosas gradualmente. Hace 10 años no podías ver a una persona que se declarará gay. Hoy tenemos un diputado DC que es homosexual. Lo irónico es que lo discriminan más por ser de origen popular”, dijo Patricio Navia sobre el desarrollo chileno.
Sobre la cartera ministerial, Navia comentó que la despolitización del gabinete es lo que les juega en contra. “Se necesita un gabinete con gente que tenga habilidad política, que se sepa manejar en este ámbito para que sean la primera línea de defensa”, dijo el sociólogo. Además, agregó que los problemas que explotan por la falta de experiencia terminan desgastando a Bachelet.
También criticó a la figura del ministro Peñailillo: “Existe un problema estructural en el gabinete. Peñailillo no defiende el Gobierno, sino a Bachelet”, sentenció.
