Marcos Barraza, militante del PC fue nombrado ayer por la Presidenta
El sindicato Histórico de Trabajadores y Trabajadoras de Universidad Arcis, envió un comunicado en que cuestiona fuertemente el nombramiento de Barraza, debido al rol que tuvo en «el retiro de capitales por parte de Inmobiliaria Libertad e ICAL desde Universidad ARCIS, cuestionable hecho que, entre otras causales, provocó la aguda crisis financiera que hoy afecta a la Universidad», según los trabajadores.
Diversas han sido las críticas a la designación de Marcos Barraza, del PC, como Ministro de Desarrollo Social, debido a su vínculo con la Universidad Arcis.
El diputado UDI Juan Antonio Coloma dijo que «durante la comisión investigadora de la Arcis, él fue citado e invitado a dar su testimonio como director de ICAL y como director, el año 2012, de la universidad Arcis, instancias a las que se negó a asistir». Además, la diputada María José Hoffmann aseguró que «es un nombramiento que nosotros esperamos que no acarree los mismos problemas de la universidad al Ministerio».
Pero las críticas no sólo han venido desde la oposición política, pues el Sindicato Histórico de Trabajadores y Trabajadoras de Universidad Arcis mira con desconfianza dicho nombramiento. «Miramos con sorpresa e incredulidad dicho nombramiento y rechazamos los dichos emitidos por el ex subsecretario de Previsión Social, quien afirmó que estaba ‘resuelto’ el tema de Universidad Arcis. Al respecto, debemos señalar que la autoridad ministerial omite la existencia de alrededor de una centena de demandas laborales interpuestas en los Tribunales de Justicia en contra de la unidad económica conformada por la Corporación Arcis, Inmobiliaria Libertad, Partido Comunista de Chile e Instituto de Ciencias Alejandro Lipschutz ICAL y sus múltiples R.U.T comerciales», aseguraron por medio de un comunicado.
Explican que Marcos Barraza integró durante varios años el directorio de ICAL, principal controlador comercial de Universidad Arcis, entre 2006 y 2013. «Entre mayo de 2011 y marzo de 2014, Marcos Barraza fue socio de ICAL Capacitaciones y en septiembre de 2012 llegó a la sociedad de Ediciones ICAL, todas instituciones pertenecientes al Partido Comunista de Chile».
Desde dicha «plataforma política y comercial» integró el directorio de la Inmobiliaria Libertad S.A., dueña de las propiedades de Universidad Arcis. En ese contexto, según consta en el acta de sesión del 12 de diciembre de 2012, «se reunieron los cuatro socios de la Inmobiliaria Libertad integrada por ONG ICAL, representada por Claudio de Negri; Ediciones ICAL, representada por Marcos Barraza; Inversiones Salvador (académicos de U. Arcis) y Max Marambio a través de Nazareno S.A. En dicha acta se indica que Marcos Barraza, como presidente del directorio de Inmobiliaria Libertad, procedió a repartir y retirar capitales provenientes de Universidad Arcis a favor de ICAL», añade el sindicato.
Según revela la documentación contable, a la que tuvo acceso el Sindicato Histórico de Trabajadores y Trabajadoras, entre 2009 y 2013, la Universidad Arcis traspasó $174 millones a ICAL Capacitación Ltda., en pagos mensuales que oscilaron entre $3,4 millones y $2,8 millones, documentados mediante facturas en las que se indicaba pago por “cursos de capacitación y desarrollo social”. «Tales cursos nunca fueron ofrecidos o realizados en Universidad Arcis, no existiendo documentación ni testigos que avalen tales capacitaciones, aunque sí millonarios pagos», establece el documento.
El referido sindicato interpuso, en 2014, una demanda de «Tutela por Derechos Fundamentales y Unidad Económica en contra de la Corporación Arcis, Inmobiliaria Libertad, Partido Comunista de Chile e Instituto de Ciencias Alejandro Lipschutz ICAL y multi-RUT comerciales», la que se encuentra pendiente de resolución final en el Segundo Juzgado de Letras del Trabajo, causa que lleva adelante la jueza Patricia Fuenzalida.
Además existen más de 90 demandas por “autodespido” o “despido indirecto” de trabajadores de Universidad Arcis que han sido aceptadas por los Tribunales de Justicia Laboral, responsabilizando en todas ellas a la unidad económica conformada por las mismas instancias antes señaladas, es decir, la Corporación Arcis, Inmobiliaria Libertad, Partido Comunista de Chile e ICAL y multi-RUT comerciales.
«Demandamos del señor Marcos Barraza una explicación creíble, razonable y coherente sobre el retiro de capitales por parte de Inmobiliaria Libertad e ICAL desde Universidad Arcis, cuestionable hecho que, entre otras causales, provocó la aguda crisis financiera que hoy afecta a la Universidad», solicita el sindicato.
«Del mismo modo, pedimos aclarar su participación en tales negocios educativos, cumpliendo así con el mandato de la actual administración del Gobierno de Michelle Bachelet que exige altos estándares de probidad y transparencia pública», añaden.
Finalmente, exigen que el Partido Comunista de Chile asuma su «responsabilidad política, ética y económica en la profunda crisis de Universidad Arcis, buscando soluciones concretas a las justas demandas laborales de trabajadores y trabajadoras que debieron ‘autodespedirse’ de Universidad de Arte y Ciencias Sociales, Arcis, después de 7 meses sin pago de sueldos, sumado a millonarias deudas previsionales y de salud». Añaden que «esperamos un justo y bienvenido gesto de solidaridad con la clase trabajadora de Universidad Arcis proveniente de la Central Unitaria de Trabajadores y Trabajadoras de Chile dirigida por la profesora y militante comunista, Sra. Bárbara Figueroa Sandoval».
