Burgos seguirá a cargo de las negociaciones en el Congreso a pesar de las críticas
Otro nombre es el del abogado y jefe de la División Jurídica, Julio Pallavicini, quien junto a la actual contralora (s) son respaldados por la asociación de funcionarios de la Contraloría que defiende la nominación de un profesional interno y que en las últimas semanas desplegó un intenso lobby en el Senado con la intención que se rechazara la propuesta de Enrique Rajevic.
El Gobierno está estudiando la posibilidad de designar a la actual contralora (s), Patricia Arriagada, como opción de la Presidenta Michelle Bachelet para suceder a Ramiro Mendoza y evitar un nuevo traspié en el Senado como el ocurrido con Enrique Rajevic, cuyo nombre fue rechazado por la Cámara Alta tras obtener 21 votos de los 22 necesarios para su ratificación.
Según lo que consigna este sábado La Tercera, el nombre de Arriagada se está barajando luego de la positiva evaluación que hizo en junio la mandataria por la gestión que estaba realizando en el cargo en reemplazo de Mendoza, ya que había logrado sacar resoluciones con eficiencia. Además, se suma a lo anterior el declarar ilegal el Censo efectuado en el Gobierno de Sebastián Piñera, tras el requerimiento que hicieron parlamentarios de la DC.
El rechazo de Rajevic como propuesta del Ejecutivo para el cargo de Contralor llevó a La Moneda a estudiar la posibilidad de nombrar a un funcionario interno del órgano, argumentos que se fundan en que con esto se evitaría una nueva seguidilla de críticas entre los legisladores.
Los parlamentarios reclamaron la designación de Rajevic por una falta de imparcialidad por haber trabajado en varios ministerios del bloque oficialista, a lo que se adhiere el cuestionamiento a la deuda mantenida con el Estado por una beca a la que accedió para estudiar en España.
Con la posibilidad de nombrar a Arriagada, sería difícil que los parlamentarios opositores justificaran un eventual rechazo. En el oficialismo, en tanto, argumentan que un profesional con las características de la actual contralora (s) podría generar consensos transversales, especialmente en la Alianza.
El senador y timonel de la UDI, Hernán Larraín, explica que su colectividad había propuesto que fuera un funcionario interno, «porque hay que privilegiar la carrera funcionaria y quienes han hecho un trabajo serio y riguroso».
A su vez, el independiente pro DC, Pedro Araya, asegura que «si fuera alguien de la institución conocería mejor su funcionamiento y llevaría de mejor forma el proceso de modernización de la Contraloría».
En tanto, el ministro del Interior, Jorge Burgos, sería el responsable de llevar adelante las conversaciones para conseguir los votos necesarios que permitan la ratificación de Arriagada como contralora, a pesar de las críticas que generó en el Senado la carencia de diálogo a la hora de proponer al candidato.
Sin embargo, en La Moneda aseguran que cualquier decisión que se adopte se tomará después de la votación del fiscal nacional.
Entre otros nombres que figuran, según el oficialismo, es la opción de la abogada y actual fiscal de la Contraloría, Ruth Israel. Sin embargo, en el organismo aseguran que no se trataría de una funcionaria de carrera, puesto que la profesional ingresó en 2011, bajo la administración de Mendoza.
También se está nombrando al abogado y jefe de la División Jurídica, Julio Pallavicini, cuya alternativa fue evaluada hace algunos meses, incluso antes de proponer a Rajevic.
Tanto Arriagada como Pallavicini son nombres propuestos por la asociación de funcionarios de la Contraloría organización que defiende el nombramiento de un profesional interno y que en las últimas semanas desplegó un intenso lobby en el Senado con la intención que la designación de Rajevic fuera rechazada.
