«Un país sin memoria no avanza, una ciudad sin memoria no avanza. Por lo tanto, en este canto a la memoria, y en este canto a la vida», dijo la jefa comunal tras la votación donde la propuesta se impuso por cinco votos contra tres.
El Concejo Municipal de Providencia, con cinco votos a favor y tres en contra, aprobó este martes erigir un memorial en homenaje a los tres profesionales comunistas que hace 30 años fueron secuestrados y posteriormente degollados por efectivos de Carabineros, en uno de los casos más emblemáticos de violaciones a los Derechos Humanos cometidas por los organismos represivos de la dictadura de Augusto Pinochet.
La instalación, que antes de ser analizada por los cocejales ya contaba con el visto bueno del Consejo de Monumentos Nacionales, se ubicará en la esquina de la avenida Los Leones con El Vergel, lugar donde en ese entonces funcionaba el colegio Latinoamericano de Integración y donde, el 29 de marzo de 1985, tuvo lugar el operativo de la Dicomcar en el que fueron interceptados el profesor José Manuel Parada y el sociólogo de la Vicaría de la Solidaridad Manuel Guerrero. Ello ocurrió un día después del secuestro de Santiago Nattino en la esquina de Apoquindo con Espoz.
La alcaldesa de Providencia, Josefa Errázuriz, no ocultó su satisfacción por la decisión y, acompañada por los hijos de las víctimas, afirmó que se trata de tres personas que «por el sólo hecho de pensar distinto fueron degollados, allí, frente a un colegio donde estaban sus hijos, donde estábamos los apoderados, donde estaban los profesores y donde un profesor hasta hoy vive con una bala en el cuerpo».
Agregó que «por lo mismo hoy hemos venido con ununa propuesta sencilla, limpia, emotiva y a la vez muy bonita de un canto a la vida, de decir con ese sencillo homenaje ‘nunca más’, y decirla a Manuel, a Santiago y a José Manuel, que su sacrificio no fue en vano, porque en Chile no permitiremos que nunca más hechos como este ocurran. Un país sin memoria no avanza, una ciudad sin memoria no avanza. Por lo tanto, en este canto a la memoria, y en este canto a la vida».
Sobre las aprensiones que existían frente al monumento, la jefa comunal le envió un mensaje a los vecinos que residen en el edificio contiguo, indicando que será «un bien nacional de uso público que se va a transformar en un espacio de paz, de alegría y de reconciliación, eso es lo que queremos para el Chile del mañana».
Y sobre las propuestas para que se levantara en otro lugar, específicamente en la Plaza la Alcaldesa ubicada a dos cuadras, Josefa Errázuriz afirmó que debía estar allí porque «en esa esquina, no en otra, se llevaron a Manuel y a José Manuel».
En tanto, Manuel Guerrero hijo agradeció a los concejales, a la alcaldesa Errázuriz y a los vecinos que han respaldado la iniciativa, enfatizando que «para nosotros singifica un hito en un ciclo en que hemos venido cultivando la memoria respetuosa de los Derechos Humanos desde una consigna que es una elaboración positiva de la memoria».
«La Municipalidad de Providencia con esto no solamente nos repara desde el punto de vista del patrimonio y en forma simbólica lo que fue la pérdida, de que agentes del Estado hayan secuestrado y degollado a nuestros familiares, sino que también la comuna de Providencia da una lección al país: la lección es que estas temáticas de la memoria en torno a las violaciones de los Derechos Humanos son temas controversiales, son temas donde todos tenemos distintas vivencias, posiciones en las cuales nos tocó vivir aquellos hechos y aquellos años. Sin embargo acá, el Concejo Municipal, si ustedes revisan absolutamente todas las intervenciones de todos los colores políticos, todos estuvieron de acuerdo con que en la comuna de Providencia se rindiera homenaje a nuestros familiares y a estos ciudadanos y luchadores sociales por la democracia, y hubo un consenso unánime de condena a las violaciones a los DD.HH., a que agentes del Estado nuevamente alguna vez, ojalá nunca, cometan este tipo de barbaridades», expresó.
