«Me ofrecieron minas de platino que, según ellos, estaban en Canadá o Australia (…) que se las estaban peleando el presidente ruso Vladimir Putin y el Senado de Estados Unidos. Yo ahí mismo pensé que todo era falso», sostuvo Gilda Verónica Vanni Zunino ante la fiscalía por el llamado caso Caval.
Gilda Verónica Vanni Zunino declaró voluntariamente ante la fiscalía el pasado 15 de febrero en el marco del caso Caval. La mujer que sirvió de nexo entre Natalia Compagnon y Gonzalo Vial Concha explicó a los persecutores que por su trabajo en el sector minero fue contactada por la nuera de la Presidenta Bachelet en 2012.
Según su versión, se citaron en un café en la calle Isidora Goyenechea, en la comuna de Las Condes. Compagnon llegó acompañada de dos personas, «me ofrecieron minas de platino que, según ellos, estaban en Canadá o Australia (…) que se las estaban peleando el presidente ruso Vladimir Putin y el Senado de Estados Unidos. Yo ahí mismo pensé que todo era falso», relató.
Luego de una segunda reunión, Vanni Zunino le comunica a Compagnon que no trabajará con ellos, pues -dijo- uno de los acompañantes de la esposa de Sebastián Dávalos había estafado a uno de sus clientes.
«Natalia y los dos sujetos insistían en querer llegar a Juan Pablo Bamba y Gonzalo Vial, que querían presentarle negocios», declaró la mujer.
Según consigna revista Qué Pasa, como Vial Concha, necesitaba oficinas en Santiago, accedió a presentarlos, afirmó Vanni Zunino, aclarando que «en esa reunión nosotros teníamos que hablar de la oficina, pero ahí Natalia empezó a hablar de muchas asesorías y negocios que podría prestar a Gonzalo, decía que conocía a todo el mundo, que era la nuera de Bachelet y que tenía acceso a todo».
«Natalia se mostraba muy convencida de que podría lograrlo. Yo le dije que eso era imposible y ella insistía en que tenía a ‘un tipo mojado en Codelco que trabajaba para ella y con ella’, así Gonzalo Vial les creyó todo», recalcó.
“Me ofreció simple y llanamente $ 4 millones mensuales si Gonzalo Vial aceptaba este proyecto. Yo me negué a esta situación», dijo.
Posteriormente, «hablé con alguien que tenía conocidos que trabajaban con Bachelet y le dije que le informaran esta situación, no sé qué pasó», concluyó.
El otro socio de Caval, Mauricio Valero, declaró el pasado 23 de marzo: «(Compagnon) Ella me decía que necesitaba dinero urgente en efectivo para realizar gestiones para Gonzalo Vial en servicios que él requería, no me daba ningún detalle, no me consta que esos servicios se realizaran ni que el señor Vial lo solicitara. Sí me consta el vínculo que existía entre ellos, ya que Natalia manejaba toda la relación con él. Era el principal cliente de Caval. Un par de veces yo tuve contacto con Vial en reuniones, pero él prefería trabajar con Natalia, según lo que ella me decía ‘él no quiere verte a ti’. Por lo de Gonzalo Vial se tuvo una facturación de más de $1.100 millones. Yo pensé que iba a ser menos dinero, ella puso los montos de lo acordado con Gonzalo Vial, y yo procedía a emitir las facturas, las cuales eran facturas de Caval».
