Las cuatro personas que están acusadas de quemar un templo evangélico se encuentran hospitalizados en Temuco.
El fiscal regional de La Araucanía, Cristián Paredes, aseguró que los cuatro comuneros que se encuentran en huelga de hambre desde hace 100 días «no son las víctimas, sino que son los imputados de un delito gravísimo», quemar un templo evangélico en Padre Las Casas.
En declaraciones que son recogidas por La Tercera, el persecutor sostuvo: «Me parece que hay que colocar la situación en la perspectiva correcta. Las cuatro personas que hoy están en huelga de hambre no son las víctimas, sino que son los imputados de un delito gravísimo. Y ese ilícito es el incendio de un templo evangélico, ocurrido la noche del 9 de junio del año pasado, y que en ese minuto estaba ocupado por a lo menos siete adultos y cinco niños. Los intimidaron con armas, los sacaron y quemaron el templo”.
Los comuneros Alfredo Tralcal y los hermanos Ariel, Benito y Pablo Trangol, fueron trasladados el pasado miércoles desde el Centro de Cumplimiento Penitenciario de Temuco hasta el hospital de la ciudad de la IX Región.
“El ilícito responde a todos los presupuestos que prevé la ley de conductas terroristas, y por eso están acusados, por el delito de incendio en dicho carácter. Ellos fueron formalizados al día siguiente de acontecido el siniestro y aprehendidos en flagrancia. Su prisión preventiva se ha revisado a lo menos en 10 oportunidades por el juzgado de garantía y por la Corte de Apelaciones, y siempre se ha respetado el debido proceso”, agregó el fiscal.
Para el próximo miércoles 27 de septiembre está fijada la audiencia de preparación para el juicio oral.
