Foto: Pilar Olivares/Reuters
Los proyectos serán ofrecidos bajo la modalidad de asociaciones pública y privada, el mecanismo de obras por impuestos y bajo el esquema de iniciativa privada, según explicó el director de la agencia estatal de promoción, José Salardi. La economía peruana creció un 0,86% interanual en diciembre y cerró el año pasado con una expansión de 2,68%, mucho menor al récord de 13,61% de 2021.
Perú anunció proyectos de inversión privada y pública por unos 9.000 millones de dólares que espera adjudicar este y el próximo año, en busca de reactivar la economía que se desacelera en un contexto de protestas antigubernamentales.
El director de la agencia estatal de promoción, José Salardi, dijo en una cita con inversionistas que la cartera de 38 proyectos incluye obras viales, de energía y saneamiento en el país, que desde diciembre ha sido sacudido por protestas, a veces violentas, tras la destitución del presidente izquierdista Pedro Castillo.
“La clave es recuperar la confianza (…) y nosotros tenemos un modelo maduro, con fundamentos sólidos”, sostuvo Salardi, jefe de Proinversión.
“Para lograrlo estamos simplificando procesos, estandarizando los contratos y desplegando todo un trabajo articulado con los ministerios, autoridades y el sector privado”, añadió.
En la misma conferencia con inversionistas, el ministro de Economía, Alex Contreras, afirmó que la economía del segundo mayor productor mundial de cobre fue afectada en diciembre y enero por las protestas, pero que en febrero ha habido una recuperación según algunos indicadores adelantados.
Según datos del ministerio de Economía, la inversión privada en Perú cayó un 0,5% el año pasado, lo que se compara con el crecimiento de 37,4% en el 2021, cuando se recuperó luego de la pandemia.
“La meta es que inversión privada aumente un 3% este año”, manifestó Contreras en la conferencia. “La necesidad de reactivación es urgente (…) y no es fácil en una economía recuperarse de un (intento de) golpe de Estado”, refirió.
Las protestas, con un saldo de 60 muertos en dos meses, han disminuido en las últimas semanas, pero existe el riesgo de que se reactiven bloqueos de carreteras.
Los manifestantes piden la renuncia de la presidenta Dina Boluarte, el cierre del Congreso, una nueva Constitución y elecciones anticipadas.
