Cuatro personas fueron condenadas a distintas penas de cárcel por el Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Curicó, luego de ser hallados culpables de tráfico de drogas, porte ilegal de armas y receptación.
Sus arrestos se concretaron cuando Carabineros detectó mil cien plantas de marihuana el 8 de marzo del año pasado en el sector llamado La Valdesina, a unos 10 kilómetros de Molina, Región del Maule. Cuando los uniformados llegaban al lugar fueron repelidos a disparos, lo que originó un enfrentamiento, y finalmente cayeron presos Miguel Ángel Cruz Rojas, Cristóbal Eduardo López Pérez y los hermanos Jorge Andrés y Alexis Arnaldo Díaz Araya.
Ellos portaban un total de 10 kilos 578 gramos de marihuana que habían recolectado de la plantación, tan sólo minutos antes de haber sido detectados por la policía.
La fiscal jefe de Molina, María Lorena González, quien ante el tribunal presentó los antecedentes señaló que «todos ellos portaban mochilas con marihuana y además dos de los imputados portaban armas de fuego con las cuales incluso procedieron a repeler a Carabineros cuando ingresaron a la detención. En definitiva la fiscalía acusó a los imputados por tráfico ilícito, además de porte ilegal de arma de fuego y receptación, toda vez que también logramos acreditar que las armas habían sido robadas a sus propietarios».
A pesar que la defensa de cada uno de los imputados alegó absolución, el tribunal acogió la tesis de la fiscalía y condenó a los acusados.
Cristóbal López Pérez y Miguel Ángel Cruz Rojas, de 29 y 30 años, respectivamente, fueron condenados cada uno a cinco años y un día por el delito de tráfico ilícito de estupefaciente y una multa de 10 UTM ($390.000), además de 800 días de cárcel por porte ilegal de arma de fuego y a 200 días por receptación, incluyendo una multa de 2 UTM.
Entre tanto, los hermanos Jorge y Alexis Díaz Araya, de 25 y 20 años, respectivamente, recibieron una pena de cinco años y un día por el delito de tráfico ilícito de estupefaciente y una multa para ambos de 10 UTM ($390.000).
De esta forma los condenados deberán cumplir las penas sin la posibilidad de optar a ningún tipo de beneficio.
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