El contralor general de la República, Ramiro Mendoza, dijo que tras las irregularidades detectadas en la Comisión Nacional de Acreditación, «lo que hay es una gran oportunidad para que podamos mejorar la calidad de nuestras universidades, particularmente de nuestras universidades privadas».
La autoridad concurrió hasta la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados que investiga las denuncias que afectan a la CNA, precisando que en 2012 la Contraloría General de la República evacuó un informe (Nº87), que planteaba irregularidades administrativas de mayor y menor intensidad en la Comisión.
Mendoza dijo que lo suscitado en el sistema de acreditación, «es un problema esencial de confianzas», y que al organismo fiscalizador le preocupa que estas instituciones estatales «tienen que ser creíbles por los ciudadanos».
«En nuestro rol fiscalizador hemos hecho presente las principales observaciones que deben corregirse para que se produzca un restablecimiento de las confianzas», agregó Mendoza, quien comentó que estas medidas tienen que ver con la dictación de reglamentos pendientes, un rol más efectivo y potente de supervisión y vigilancia de las entidades acreditadoras y de los pares evaluadores.
El contralor general comentó que esta entidad tiene desde hace bastante tiempo más de 60 informes respecto al funcionamiento de la educación superior estatal y de la Comisión Nacional de Acreditación. «Hoy día, producto de una serie de circunstancias irregulares, todos los ojos están mirando un fenómeno que tiene una larga fermentación en su preparación. Lo que hay hoy día es el resultado de mucho tiempo que hemos ido observando, y ese informe nuestro resulta ser bastante clave para los efectos de buscar una salida administrativa respecto de la credibilidad de esta institución», acotó.
Mendoza agregó que todas las autoridades se hacen responsables de sus momentos y sus conflictos, y precisó que «a estas autoridades les tocó este conflicto y nos encantaría que cada autoridad hiciera medidas muy profilácticas para que los conflictos se pudieran evitar, pero desgraciadamente no siempre es así».
Mencionó que los informes están en la página web de la Contraloría, se les informan a los ministros, a los subsecretarios, a los jefes de control interno, «a veces no los ponderan en lo que va a suceder», recordando que los antecedentes arrojados por la investigación realizada por su institución a raíz del comportamiento de un miembro de la CNA, se pusieron en su oportunidad en conocimiento del Ministerio Público.
upi/so//
