Publicidad
Anticonceptivos de ciclo extendido: ¿es riesgoso tener la regla cada tres meses? Nuevos métodos

Anticonceptivos de ciclo extendido: ¿es riesgoso tener la regla cada tres meses?

Especialistas reconocen que el sangrado que se produce con la ingesta de anticonceptivos hormonales no es necesario y se puede evitar en la mayoría de los casos.


Loreto Gormaz tiene 21 años y realiza deporte frecuentemente. Es por eso que la menstruación puede llegar a ser algo incómoda para entrenar, sobre todo porque a veces sentía dolores y molestias para su vida diaria. Además, como ella pololea, buscó un método anticonceptivo que se acomodara a sus necesidades: es por eso que decidió rebajar su cantidad de reglas a las mínimas posible durante el año. «Estoy tranquila y así me puedo organizar mejor. Averigüé y no hay problema en estos métodos, son seguros y más cómodos», señala.

Como Loreto, cada vez es más frecuente que mujeres opten por métodos anticonceptivos de ciclo extendido, que hacen que «la regla» les llegue cada tres meses, sobre todo en países europeos. Sin embargo, en nuestro país existe cierta desconfianza y temor por estos métodos al desconocer cómo funcionan.

¿Son seguros? Los especialistas recalcan que estos anticonceptivos no afectan más que cualquier otro tipo de método hormonal. «Hay que entender que los anticonceptivos aportan estrógeno (habitualmente etinilestradiol) y un progestágeno (hay de diferentes tipos, siendo este último el responsable de la capacidad anticonceptiva de los mismos). Y la principal característica de los anticonceptivos es que son anovulatorios, es decir frenan el proceso de desarrollo de un folículo (foliculogénesis) en el ovario», explica el ginecólogo de Clínica Las Condes Rodrigo Macaya.

«Los anticonceptivos entregan dosis de estrógeno y progesterona al organismo en forma diferente a como lo hace una mujer en un ciclo espontáneo. Los anticonceptivos no sólo inhiben el proceso de ovulación, sino que también alteran la producción de la secreción de moco fértil por el cuello uterino durante los día fértiles evitando el paso de espermios desde la vagina al interior del útero», agrega el especialista.

Así explicado entonces, si no hay proceso de ovulación, no hay crecimiento endometrial y entonces tampoco menstruación.  «Pero la verdad es que la forma de presentación mas típica de los anticonceptivos y las dosis liberadas hacen no sólo que la paciente no ovule, sino que además son los mismos anticonceptivos los que hace que exista un proceso de descamado endometrial, similar a una menstruación, pero por un mecanismo diferente al que ocurre en forma natural», señala el ginecólogo y obstetra.

El Dr. Macaya recalca que esta “menstruación” producto del uso de un anticonceptivo habitual -el cual habitualmente tiene 3 semanas de medicación y 1 semana de descanso o placebos- se usa como testigo mensual de que no existe un embarazo. Sin embargo esa supuesta menstruación «puede ser suprimida con el uso continuo del mismo (o sin período de descanso o uso de placebos de un anticonceptivo), manteniendo la eficacia anticonceptiva».

Y es que desde que se creó el anticonceptivo hormonal a fines de los años 50, se imitó el ciclo femenino de 28 días, para que simulara la menstruación, pero es en realidad un sangrado artificial ya que una mujer que toma anticonceptivos podría tener ciclos de la cantidad de días que quiera. Sólo cuando se interrumpa la ingesta de la hormona, se producirá la descamación del endometrio por deprivación.

Es por eso que los métodos de ciclo extendido que se están comercializando son aquellos que consisten en tomar durante 84 días comprimidos activos y luego 7 placebos, lo que reduce la regla a cada tres meses.

Pero también podría tomar seguido -sin descanso ni placebos- las pastillas anticonceptivas convencionales o incluso suprimir el descanso de los parches y los anillos para obtener el mismo resultado.

A la mujer no le afecta no tener un ciclo tradicional e incluso puede tener algunas ventajas. «Existen mujeres que presentan síntomas producto de las variaciones hormonales de su propio ciclo menstrual como síndrome premenstrual, cefaleas o dolor pélvico. Y la mayoría de estos síntomas pueden ser controlados con el uso de anticonceptivos pero incluso así hay mujeres que con el sangrado propio de los anticonceptivos mantienen algunos síntomas. Es en este grupo de mujeres en las que se observa los mayores beneficios del uso de esquemas de anticonceptivos continuos con supresión de la menstruación por períodos prolongados», sostiene el Dr. Macaya.

Eso sí, el especialista reconoce que a veces no todo es miel sobre hojuelas: «Si bien la mayoría de las mujeres tolera muy bien el uso continuo de anticonceptivos y mantienen ausencia de menstruaciones, hay pacientes que pueden comenzar con goteo intermitente cada vez más frecuente. Este goteo no traduce en general una enfermedad detrás de ello, si no que es habitualmente un efecto no deseado del uso continuo de los anticonceptivos más frecuente en mujeres delgadas y que usan anticonceptivos con bajas dosis de estrógeno».

Aún así cree que, en teoría, toda mujer sana puede usarlos. «Se recomienda siempre antes de uso de cualquier anticonceptivo el buen control ginecológico por personal calificado de salud (médico o matrona). Existen algunas contraindicaciones formales para el uso de cualquier anticonceptivo como antecedente de trombosis, enfermedades estrógeno-dependientes como cáncer de mama o endometrio, enfermedad hepática o sangrado uterino de causa aun indeterminada», señala.

– Si se deja de tomar el anticonceptivo, ¿desde cuándo puede quedar embarazada?

– La actividad anovulatoria de un anticonceptivo usado correctamente deja de existir en general una semana después de suspendidos. Pero hay variaciones personales mujer a mujer por lo que debe considerarse que si se suspende un anticonceptivo, esa mujer, si antes ovulaba normalmente, entonces ahora lo hará nuevamente y quedará expuesta a riesgo de embarazo. Aquí cabe agregar que si el deseo es suspender el anticonceptivo para buscar un embarazo, se puede hacer de inmediato, sin necesidad de dejar un tiempo “de descanso” o “ desintoxicación” de los mismos antes de embarazarse.

Publicidad

Tendencias