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El sindicato que representa a los trabajadores en Escondida, la mina de cobre más grande del mundo, acaba de recibir una señal de que el propietario BHP Billiton Ltd. podría estar dispuesto a llegar a un acuerdo en las negociaciones salariales en curso.
Trabajadores en la mina de cobre Spence de BHP Billiton en Chile aceptado la oferta salarial de la compañía, dijo el presidente del sindicato, Ronald Salcedo, en un mensaje de texto. El acuerdo incluye un bono único de 13.5 millones de pesos ($ 21,300) y un aumento del salario real del 2 por ciento.
«Si la compañía quiere llegar a un acuerdo con Spence, podría significar que también quieren resolver sus problemas con nosotros», dijo Carlos Allendes, portavoz número 1 de la Unión Escondida, en un comunicado. entrevista en Santiago la semana pasada, antes de que los trabajadores de Spence aceptaran la propuesta de la compañía. «Lo que pase con Spence no determinará qué sucede con Escondida, pero es útil en la mesa de negociaciones».
Las conversaciones salariales entre BHP y el sindicato Escondida, que representan a 2.500 trabajadores, comenzaron a principios de este mes y los trabajadores presentaron su propuesta salarial más ambiciosa. Se espera que la compañía responda el lunes y las conversaciones podrían comenzar esta semana. Las negociaciones se reanudan después de que se rompieron ásperamente el año pasado, lo que resultó en la huelga minera más larga en la historia moderna de Chile. Las dos partes deben llegar a un acuerdo antes de que expire el contrato actual el 31 de julio.
Para estar seguros, la relación de la compañía con los trabajadores de Spence es diferente a la de Escondida, dijo Allendes. El departamento de relaciones laborales de Escondida fue eliminado hace unos cinco años, mientras que Spence se mantuvo en su lugar, lo que permite a los trabajadores canalizar sus demandas a medida que surgen.
«No tenemos una línea directa de comunicación con la compañía, por lo que llegamos a cada negociación con una acumulación de problemas», dijo Allendes. «Si la puerta no está abierta para negociar, esto va a ser difícil».
