En las elecciones municipales del 23 de octubre de 2016 habrá un número récord de candidatas a alcaldesa. Las 230 mujeres que se presentan superan el máximo anterior de 215 candidatas, en 2008. Si bien hay avances en el total de candidatas, no se ha logrado aumentar el número de comunas en que las personas tengan la opción de votar por una mujer. En esta elección el número de comunas en las que hay al menos una candidata ha bajado de 175 en 2008 a 168 en 2016.
Desde que se separó la elección de alcaldes de la de concejales en 2004, el número de candidatas a alcaldesas ha fluctuado entre un mínimo de 170 en 2012 a un máximo de 230 en 2016. Ya que el total de candidatos que compiten también ha fluctuado, el porcentaje de mujeres ha pasado de un 16,7% en 2004 a un 17,5% en 2008. Luego cayó a un 14,7% en 2012. En 2016, aumentó a un 19,0%. Ese 19% es el porcentaje más alto observado desde que se realizan elecciones directas de alcaldes. Si bien es la cifra más alta desde 2004, solo representa una leve mejora. En 12 años, se produjo un crecimiento del 13,8% en el porcentaje de mujeres candidatas. A ese ritmo, en las elecciones de 2102 (en el siglo XXII), las mujeres recién constituirán un 30% del total de candidatos a alcaldes.
Otra forma de analizar la presencia de mujeres en las elecciones municipales es mirando lo que ocurre a nivel de comunas.
La probabilidad de que una mujer compita tiende a aumentar en comunas donde ya ha habido mujeres candidatas. En especial, la probabilidad de que haya una mujer candidata aumenta cuando la comuna ya tiene una alcaldesa. De hecho, en esta contienda, de las 43 comunas gobernadas por mujeres, en solo tres de ellas —Cabo de Hornos, Renca y Temuco— no compite ninguna candidata.
[cita tipo= «destaque»]En 2004, hubo al menos una candidata en 155 comunas. En 2008, 175 municipios tuvieron al menos una mujer compitiendo por la alcaldía. En 2012, el número de comunas con al menos una candidata bajó a 143. En 2016, serán 168 las comunas del país donde habrá al menos una candidata. El hecho de que haya más candidatas en total pero que haya menos comunas con candidatas, refleja una preocupante tendencia que hemos observado en elecciones recientes.[/cita]
Si bien esto permite anticipar que en la medida que haya más comunas gobernadas por mujeres habrá más candidatas, el número de comunas gobernadas por mujeres no ha variado mucho desde 2004. Ese año, hubo 42 comunas en las que resultó ganadora una mujer. En 2008, el número aumentó en 4, cifra que se mantuvo para 2012. No vemos que haya un aumento en el número de comunas gobernadas por mujeres. Es verdad que en 2012 hubo algunas comunas simbólicas en que resultó ganadora una mujer, como Santiago o Providencia, pero hubo otras que ya no fueron gobernadas por mujeres, como Concepción o Iquique. Luego, unas golondrinas no hacen verano. El número de comunas gobernadas por mujeres se ha mantenido estable desde 2004.
Como las mujeres tienden a ser candidatas en comunas donde hay alcaldesas, el hecho de que no aumente el número de comunas gobernadas por mujeres induce a que el mayor número de candidatas que se presentan en 2016 se concentre en un número menor de comunas que en 2008.
Como es importante que aumente el número de candidatas, pero también es esencial que aumente el número de comunas en las que se presenta una candidata, sugerimos que se establezca un sistema más efectivo de cuotas de género. Se debiera exigir a los partidos una cuota mínima de candidatas a nivel nacional, replicando la ley de cuotas ya establecida para elecciones legislativas. Esto permitirá aumentar tanto el número de candidatas como el número de comunas en las que los electores tienen posibilidad de escoger a una mujer.
En democracia, la representación descriptiva también ocupa un lugar importante. Porque las mujeres constituyen una mayoría de la población y de los votantes, los partidos deben hacer mayores esfuerzos para incluir más mujeres en sus listas de candidatos y para dar la posibilidad a los electores de las 345 comunas del país votar por una mujer.
