El subsecretario del Interior, Rodrigo Ubilla, comunicó que tras los disturbios hubo doce personas aprehendidas por desórdenes graves y otras dos por porte de arma blanca. En tanto, en regiones no se registraron incidentes.
Lo que parecía una jornada normal por el Día del Trabajador, se transformó nuevamente en una batalla campal en el centro de la capital empañando una vez más la tradicional celebración organizada por la CUT.
Según Carabineros, la jornada asistió un marco de gente que ascendió entre los 12 mil y 15 mil personas.
Una vez terminado el acto central, cuyo único orador fue el timonel de la multisindical, comenzaron los primeros incidentes provocados por manifestantes exaltados.
De esta forma, en la intersección de la Alameda con Avenida España el grupo de operaciones especiales de Carabineros logró disolver a las personas mediante gases lacrimógenos y carros lanzaaguas.
Además, se detuvo a cerca de 12 personas quienes generaron disturbios en la vía pública y lanzaron elementos contundentes contra los carros de efectivos policiales.
En tanto, unas 50 personas comenzaron a quemar papeles en la intersección de calle Bulnes con la Alameda.
A su vez, el subsecretario del Interior, Rodrigo Ubilla, comunicó que tras los incidentes hubo doce personas aprehendidas por desórdenes graves y otras dos por porte de arma blanca. En tanto, en regiones no se registraron incidentes.
