Mientras el senador gremialista considera que el sistema «no es tan malo» y que el debate en torno a las reformas políticas está sobredimensionado, el también senador y timonel de la DC defendió el acuerdo con RN para modificarlo, antendiendo la necesidad de establecer unb «nuevo régimen político» en Chile para adelantarse a una posible crisis institucional por falta de participación.
Los senadores Jovino Novoa (UDI) e Ignacio Walker, presidente de la Democracia Cristiana, tuvieron la oportunidad de enfrentar su visión respecto del sistema electoral binominal en el seminario “¿El binominal en crisis?” organizado por la Universidad Finis Terrae, oportunidad en la que el timonel falangista defendió el acuerdo alcanzado con Renovación Nacional para cambiar el mecanismo, mientras que el vicepresidente gremialista defendió nuevamente sus atributos.
Durante su exposición, Novoa hizo hincapié en que las prioridades de los chilenos no están enfocadas precisamente en las reformas políticas, aunque si bien puede existir la necesidad de abordar estos temas, hay que ser cuidadosos en plantear que esta es la solución, particularmente enfocado al cambio al binominal, a otras inquietudes del electorado. Por ello considera que tal vez se está sobredimensionando el debate en torno a temas políticos.
De hecho, en opinión de Novoa, la falta de participación tiene más relación con que los políticos se han alejado de la gente que con el sistema electoral, lo que quedaría demostrado con situaciones como las ocurridas en el tema de la educación, donde si bien el país ha mejorado, igualmente existe disconformidad. Según el senador, este tipo de explosiones sociales tampoco es propia de nuestro país, sino que han surgido de formas muy similares en varios países del mundo.
Respecto del sistema binominal, el senador gremialista dijo que “tendría que ser muy malo el sistema para que se justifique cambiarlo. Yo no creo que sea tan malo. Y si hubiera que cambiarlo, las ventajas del sistema proporcional no me quedan tan claras”.
En este sentido, reconoció, por ejemplo, que según las reglas del juego del actual sistema electoral, a la UDI le ha ido mejor que a sus socios de RN. “Precisamente nosotros también en la UDI hemos tenido un beneficio, porque hemos crecido más que Renovación Nacional. Pero nadie nos regaló nada. Partimos con 14 diputados y dos senadores, Renovación Nacional partió con un cuarto de la Cámara y un cuarto del Senado. Pero esas son las reglas del juego, competimos y ganamos”, dijo.
Por su parte, Walker defendió el acuerdo al que llegó con RN en enero pasado y la necesidad no sólo de cambiar el sistema electoral, sino también el régimen presidencial, validando lo hecho como una forma de romper el statu quo en esta materia. Así, explicó que el acuerdo con Renovación Nacional en enero pasado para “un nuevo régimen político en Chile” se hizo “rompiendo el hielo, tendiendo puentes, porque el país se está polarizando”, y es imperativo, sostuvo, darle una salida a la crisis institucional que pareciera estar gestándose debido a la falta de participación.
Por eso dijo que en el documento suscrito con RN, “proponemos el fin del sistema binominal. Sólo la UDI defiende el sistema binominal, RN ya no, firmó un compromiso”.
En la misma línea, Walker se mostró partidario de la democracia representativa, festejó la inscripción automática, pero insistió en expresar su oposición al voto voluntario, asegurando con la voluntariedad bajará el porcentaje de votantes y se sub-representarán los sectores populares.
