El anuncio del Gobierno de Michelle Bachelet de entregar gratuidad al 60% de los estudiantes más vulnerables que ingresen a universidades del Consejo de Rectores (Cruch), donde las entidades privadas quedarían fuera del proceso, al menos, en una primera instancia, parece haber sido el hecho que desencadenó el malestar entre los estudiantes de universidades privadas.
Este año el Movimiento Estudiantil ha tenido un vuelco que ha llamado la atención, las universidades privadas se han unido a las formas más radicales de protestar y sus estudiantes han desarrollado paros indefinidos y tomas. Ejemplo de esto es la UDP, en la que hay 21 carreras movilizadas con tomas o paros indefinidos, «tanto por demandas internas como para exigir que el Mineduc se haga cargo de las normas mínimas de una casa de estudios privada para que las decisiones no queden “a la mera voluntad de un rector o un directorio”, tal como explica el presidente de la Federación de la UDP (Fedep), Nicolás Fernández.
El anuncio del Gobierno de Michelle Bachelet de entregar gratuidad al 60% de los estudiantes más vulnerables que ingresen a universidades del Consejo de Rectores (Cruch), donde las entidades privadas quedarían fuera del proceso, al menos, en una primera instancia, parece haber sido el hecho que desencadenó el malestar entre los estudiantes de universidades privadas.
A la Facultad de Comunicación y Letras le siguieron las ocupaciones de cinco facultades más: Facultad de Ciencias Sociales (4 carreras), Educación, Psicología, Derecho y Auditoría, de las que todas (4), menos psicología, permanecen en toma. Además, se encuentran en paro indefinido de sus actividades académicas ocho: Arte, Diseño, Enfermería, Tecnología Médica, Kinesiología, Obstetricia, Odontología y Psicología. En total son 21 las carreras movilizadas en la universidad dirigida por el rector Carlos Peña.
Según Nicolás Fernández, presidente de la Federación de la Universidad Diego Portales (Fedep) la movilización de la UDP es inédita. “Tiene un carácter histórico, definitivamente. Nunca tantas facultades de nuestra universidad se habían tomado simultáneamente y con una intención nacional. Aquí no sólo peleamos por mejorar nuestra situación dentro de la Portales, si no también porque el Estado sea el garante de toda la educación en Chile. Eso nunca se había dado, siempre se había peleado por cosas internas”.
En la misma línea, Fernández agrega que “si bien queremos más democracia y participación e injerencia de todos los estamentos en las políticas de la UDP, tenemos que saber que debe ser el Mineduc el garante de que esto suceda en todas las universidades privadas, porque estas cosas no pueden quedar a la mera voluntad de un rector o un directorio”, apunta.
Como parte de la Mesa Ejecutiva y Vocería de la Confech en representación de las universidades privadas, la Fedep participó en la creación del pliego de demandas, lanzado en la masiva marcha del 10 de junio, que la Confederación de Estudiantes entregará al ministro de Educación Nicolás Eyzaguirre donde se propone la creación un marco regulatorio para toda la educación superior en Chile, incluidas las universidades privadas.
Al respecto, Fernández dice que “hoy en día vemos un Estado que ese ha hecho invisible no solamente en la educación pública si no que también en la educación privada, dejándola a la deriva del control de privados y totalmente desregulados. Queremos que de una vez por todas que el Estado se haga más presente”.
Respecto a las demandas internas, actualmente la Federación trabaja junto a los centros de estudiantes movilizados para realizar un petitorio conjunto a tratar directamente con la rectoría de la casa de estudios.
